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Coaching Teleológico para ser la persona que realmente soy
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Coaching Teleológico para ser
la persona que realmente soy
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En algún momento de nuestra vida sentimos la urgencia de plantearnos ciertas preguntas existenciales, por ejemplo: ¿Quién soy? ¿Cuál es mi propósito en la vida? ¿Hacia dónde voy? Algunas personas pasarán de puntillas por estas preguntas, pero otras se afirmarán mediante una toma de consciencia que las llevará a cambiar el rumbo de sus vidas. En este artículo me gustaría centrarme en la primera de estas profundas cuestiones: ¿Quién soy realmente?
La tarea debe hacerse difícil,
pues sólo la dificultad inspira a los nobles de corazón.
Kierkegaard
Cuando cursaba la carrera de psicología, tuve la oportunidad de participar en el seminario que impartía, fuera del campus, el Dr. Manuel Villegas, profesor de la Facultad de psicología de la UB. Participé a lo largo de dos años en dicho seminario y descubrí que la psicología y la filosofía han de ir de la mano si queremos conocer la profundidad de la naturaleza humana. En estos seminarios descubrí a diversos filósofos existencialistas, entre ellos a Søren Aabye Kierkegaard, precursor del existencialismo del SXX.
En aquel momento, la lectura de los trabajos de Kierkegaard me impactó profundamente y ha influido en mi profesión, no solo como psicoterapeuta sino también como Coach. ¿De qué manera? Como psicoterapeuta y como Coach acompaño a personas que quieren descubrir quiénes son y qué sentido quieren dar a su existencia. Acompaño a personas que experimentan angustia vital o existencial. Personas que no saben quién son realmente. Personas que no quieren ser quienes están siendo. Personas que quieren ser ellas mismas.
La vida sólo puede ser comprendida mirando hacia atrás,
pero ha de ser vivida mirando hacia adelante.
Kierkegaard
La mayoría de nosotros, en algún momento de nuestras vidas, nos hemos formulado esta pregunta: ¿Quién soy? Encontrar la respuesta no será fácil. Vivir plenamente la respuesta llenará de sentido nuestras vidas e implicará un enorme compromiso con nosotros mismos. En algunos casos, esta pregunta emerge como manifestación de una crisis existencial, en otros casos surge de manera natural como parte del proceso de maduración y desarrollo como seres humanos. Es una pregunta íntima y personal que solamente nosotros tenemos la capacidad de responder.
Es la pregunta más ambiciosa que podemos llegar a hacernos.
Y probablemente nos la haremos más de una vez a lo largo de nuestra vida.
No siempre la respuesta se manifestará del mismo modo. Kierkegaard, era consciente de que: “Ser la persona que uno realmente es” es un gran reto, un noble objetivo, una aspiración ambiciosa.
Ser la persona que realmente somos y dejar de fingir ser quien no somos es un proceso, un proceso de cambio. Cambiar significa ser conscientes de lo que hacemos y las razones por las cuales hacemos lo que hacemos. Los procesos de Coaching Teleológico nos pueden ayudar a tomar consciencia de las creencias y enfoques que dificultan el cambio y nos impiden ser quien somos realmente.
¿Qué necesitan estas personas cuando acuden a un Coach Teleológico? Que éste sepa crear un clima de confianza que les permita sentirse seguros, acogidos, comprendidos y aceptados. Que no utilice ni diagnósticos, ni haga interpretaciones, ni le de consejos. Por este motivo los avances y cambios de los clientes se deben a su propio proceso de reflexión, obertura y cambio.
Hay personas que no saben exactamente quien son, ni que quieren pero en cambio, se pasan la vida huyendo de lo que no quieren ser, o están luchando permanente consigo mismas para ser algo que no son, sin poder definir quien son realmente. Estas personas sufren un tremendo malestar, saben que han de cambiar, lo intentan durante años pero no logran su paz interior. Son personas que se esfuerzan mucho y a pesar de ello siguen huyendo o luchando sin avanzar.
Solamente soñar en la persona que se supone que usted sea,
es desperdiciar la persona que es.
Friedrich G. Klopstock
¿Qué les impide ser quiénes son? Una de las razones que les impide ser ellas mismas es que a lo largo de su vida se han escondido detrás de una máscara, se han disfrazado por miedo a no ser lo suficiente buenas, temor a no ser valoradas, apreciadas o amadas. ¿Te ha ocurrido alguna vez? ¿Conoces esta sensación?
En otros casos la persona tiene miedo de ser “ella misma” y se disfraza para no ser descubierta por los demás. Ana González Herrera, psicóloga con la que formo equipo, utiliza una metáfora muy descriptiva para ilustrar esta situación. Ana González lo imagina como si en nuestro DNI, en lugar de poner nuestra foto real, hubiéramos colocado una caricatura de esta foto (las caricaturas acentúan ciertos rasgos de manera exagerada y desprecian otros) que permite reconocernos, más o menos, pero realmente no somos nosotros. Comparto con ella la creencia de que muchas personas sienten que han tenido que luchar, o siguen luchando aun, para ser ellas mismas y lo vincula con las etiquetas que nos hemos colocado o nos han ido colocando a lo largo de nuestra vida. Etiquetas a las que nos hemos habituado y con las que quizás nos hemos conformado sin cuestionarlas. Si tenemos en cuenta que los seres humanos evolucionamos, que nuestras situaciones cambian, pretender encajar permanentemente en estas etiquetas nos impide ser nosotros mismos.
Carl R. Rogers, psicólogo estadounidense, uno de los padres del humanismo, escribe en su libro, El proceso de convertirse en persona:
“Algunas personas suelen alegar que si un individuo fuera lo que realmente es, liberaría la bestia que hay en él. Esta opinión me divierte porque pienso que deberíamos observar mejor a las bestias. El león…mata cuando tiene hambre, pero no mata por matar, ni se alimenta en exceso…mientras no es más que un cachorro, es débil y dependiente, pero avanza hacia la independencia; no se aferra a la dependencia. Durante su infancia es egoísta y centrado en sí mismo, pero al llegar a la edad adulta demuestra notable cooperatividad; alimenta, cuida y protege a su cría; satisface sus deseos sexuales, pero no se entrega a orgías salvajes y lujuriosas. Sus diversas tendencias y necesidades se armonizan entre sí. Básicamente es …constructivo y confiable. Lo que deseo sugerir es que no hay motivo para sentir horror ante la idea de ser realmente y de manera profunda un miembro original de la especie humana”.
Alex Fiol Meszaros, Coach con quien formo equipo opina que en ocasiones representamos un papel y un rol de forma tan habitual y/o tan inconsciente que llegamos a identificarnos completamente con él. En ocasiones las personas nos resistimos a cambiar por miedo a “dejar de ser nosotras mismas”. Tomar conciencia de que es un rol que representamos, nos permite dejar de representarlo si así lo queremos. Tampoco tenemos la “obligación de quitarnos la máscara”, el problema aparece cuando creo que no me la puedo quitar, que no tengo otra alternativa o que no sepa cómo desprenderme de ella.
Esta máscara es una creencia sobre quien somos y como debemos comportarnos y se manifiesta cuando intuimos que hay un cierto fondo deshonesto en la imagen que proyectamos. Imagina que eres capaz de expresar en voz alta tus verdaderos sentimientos: “yo no soy tan seguro como aparento, tengo miedo de que los demás se den cuenta”.
La paradoja curiosa es que cuando me acepto a mí mismo tal como soy,
entonces puedo cambiar.
Carl Rogers
Cuando puedo expresar mis verdaderos miedos inicio el proceso de transformación para ser quien realmente soy. Reconozco la máscara que me estoy colocando y para qué me la estoy colocando. En lugar de disfrazarme para “ser una persona segura” puedo asumir que soy una persona con miedo, que se oculta detrás de una falsa máscara de seguridad. Esta toma de consciencia me permite ir al fondo de mi miedo: considero que es espantoso ser una persona insegura. No me gusta ser insegura… “debería” ser segura. Al llegar a este punto tomamos consciencia de que llevamos años manteniendo una lucha interna con nosotros mismos para cubrir unas expectativas de lo que deberíamos ser.
También podemos comprender que nos hemos sentido “obligadas” a ser “inseguras”, porque así nos han etiquetado y ya no queremos seguir llevando esa etiqueta. No sabemos de dónde nace nuestra inseguridad pero la experimentamos.
Puede ser que nos sintamos presionadas para ser las personas seguras que se espera seamos en función de nuestro rol. Pero llega un momento en que empezamos a platearnos nuestro rol y queremos vivir de acuerdo con aquello que realmente tiene significado para nosotras. Probablemente el malestar que llevamos tiempo experimentando, está relacionado con lo que creemos que se espera por el rol que representamos y que haya llegado el momento en que este rol carezca de significado para nosotros. En ese momento entramos en crisis y nos cuestionamos ¿Quién soy?
En el momento que acepto que no tengo que ser segura, que no estoy obligada a considerarme segura, se inicia el proceso de cambio. Tomo conciencia de que quiero empezar a ser quien soy auténticamente. Mi propósito en la vida no es “ser una persona segura”. Puedo sentirme insegura y no dejar de ser yo misma. En mí, cabe todo y todo se equilibra, cómo me siento no me define, solamente es una sensación, una emoción que estoy experimentando en ese momento y que soy capaz de aceptar y regular.
El sufrimiento de muchos seres humanos se produce cuando se ocultan sus propios sentimientos y los ocultan a los demás. Cuando identificamos y aceptamos nuestros sentimientos y los podemos mostrar sentimos que nos quitamos el disfraz. Cuando nos desprendemos de la obligación de ser lo que los demás esperan o lo que la sociedad considera correcto nos sentimos libres para abandonar el propósito de agradar o de cumplir las expectativas de los demás. Esta autonomía e independencia emocional nos permite elegir las metas que queremos alcanzar. Nos responsabilizamos de nosotros y de nuestros sentimientos, decisiones y resultados.
Descubrimos que podemos sentir enojo pero no somos enojo, solo estamos reaccionando ante alguna situación que estamos entendiendo como injusta, que si aceptamos que estamos enojados y dejamos de tener miedo a experimentar este dolor, esta experiencia no será destructiva. Podemos experimentar este miedo y al ser conscientes de que lo estamos experimentamos, el miedo deja de tener poder sobre nosotros. Cuando legitimo y permito experimentar estos sentimientos de manera fluida sin juzgarlos, descubro que también tengo otros sentimientos que se pueden combinar y equilibrar.
Puedo sentir miedo, pero al saber que soy valiente, confiar en superarlo. Cuando nos abrimos y aceptamos nuestros sentimientos, éstos parecen menos terribles y podremos vivir la experiencia sin necesidad de escondernos detrás de una máscara. Es verdad, me siento inseguro, por ser una situación nueva para mí, pero a la vez, puedo conectar con mi yo seguro, porque sé que aprendo rápido y estoy abierto a vivir de manera consciente esta experiencia.
Imagina que estás con un grupo de personas y empiezas a notar cierto desasosiego. El primer punto es parar. Parar y preguntarte: ¿Qué estoy sintiendo en este momento? Siento inseguridad, y está bien, me siento inseguro. ¿Qué estoy pensando? Que el hecho de sentir lo que siento no me convierte en esa persona, simplemente me estoy sintiendo así y lo respeto. Me escucho y me pregunto ¿Qué me estoy diciendo a mí mismo que me hace sentir inseguro? ¿Qué significado le estoy atribuyendo a esta situación? ¿Cómo está reaccionando mi cuerpo? ¿Qué me llega a través de mis sentidos?
De esta manera, puedo identificar lo que estoy sintiendo (no lo que es) y lo acepto, elevo mi grado de consciencia y puedo vivir la experiencia sin esconderme.
¿Qué significa ser yo?
- Reconocer y aceptar mis propios sentimientos
- Reconocer mis reacciones ante lo que estoy experimentando
- Ser quien soy en lugar de intentar ser quien no soy
- Ser quien soy en lugar de negarme a ser quien soy
- Comprender que no necesito defenderme
- Ser quien soy sin tratar de ser menos y así no despreciarme
- Dejar de sentirme culpable
- Reconciliarme con el pasado
- Ser comprensivo y no juzgarme a mí mismo
- Atreverme a ser sincero y honesto conmigo mismo.
Cómo dijo Lucio Anneo Séneca, filósofo y orador romano, en una de sus famosas frases: “No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos”. Seguramente afrontar la pregunta ¿quién soy? No sea una fácil tarea, pero como también dijo este famoso escritor: “Comienza a vivir de inmediato”. La vida es mucho más plena cuando sabemos y nos atrevemos a ser quien somos realmente. Los procesos de Coaching Teleológico pueden ser un excelente acompañamiento para esta aventura.
¿Quién soy realmente?
¿Cuándo me siento más “yo mismo”?
Hermínia Gomà
27 Enero 2011
63 Comments
Sergi Montells
¿Quién soy? Una de las preguntas más trascendetales del ser humano y que, como bien se menciona en este artículo, forma parte indudablemente de la Psicología existencial y parte de muchas de las personas que están en un momento de cuestionamiento y replanteamiento personal.
Para mí y en conjunción con lo que has comentado algunos compañeros y el artículo, ser YO, significa aceptar lo que he sido, aunque ahora no me sienta a gusto con ello, aceptar mi historia, mi pasado, y elegir libremente como quiero ser ahora, como quiero ser mañana. Centrarme en lo que realmente quiero ser, en qué actitudes y valores debo focalizarme o debo potenciar para SER lo que quiero ser.
Sabemos lo que somos, pero ignoramos lo que podríamos ser (William Shakespeare)
Júlia Coll Pons
Hi ha un llaüt que fondeja al Port de Fornells, Menorca, que té per nom “Siau qui sou”. M’encanta aquesta frase i la pronuncio sovint però per dins em dic que és molt difícil saber qui s’és, i encara més ser qui s’és.
L’article m’ha semblat força interessant. És sabut que el Coaching Teleològic té una forta influència de l’existencialisme i que descobrir qui som i quin sentit té la nostra vida, són temes nuclears. Per a què fem el que fem? Ens amaguem d’alguna cosa? No es tracta ara de qui volem ser sinó de qui som realment? Existeix una por a ser un mateix, però imaginar-se vivint i comportant-se com un és suposa un alleugeriment, una descàrrega. M’ha agradat molt la metàfora de la caricatura. Sempre he sentit a parlar de màscares i és cert que possiblement hi ha persones que en porten, fins i tot jo mateixa en algun moment. Però caricatura és més encertat perquè no deixes de ser tu sinó que és un tu desfigurat. Potencies allò que creus que “has” de potenciar o ser i en canvi redueixes o invisibilitzes allò que ets o que simplement “creus que no has de ser”. Paradoxalment, com diu Rogers, has de reconèixer-te a tu mateix i acceptar-te per poder canviar. La pregunta clau és per a què m’he posat la màscara, o la caricatura, o les etiquetes. O per a què me les he cregut fins ara si me les havien col•locat d’altres. Hem de ser autèntics. Deixar-nos ser qui som.
La cançó que exposo a continuació és una cançó infantil que pretén respondre la mateixa pregunta que l’article. L’autora o cantant no se’n surt però parla dels diferents rols que ocupa. El millor de tot i que conclouria molt bé aquest comentari, és aquesta frase: “Qui sóc jo? Qui sóc jo? Què complicat tot això. Qui sóc jo? Qui sóc jo? La resposta vull trobar” Dàmaris Gelabert https://www.youtube.com/watch?v=_EITuHjRJxc
Anem reconeixent-nos en petites situacions, fem visibles els nostres sentiments i les nostres pors i, com llegeixo cada estiu en aquell llaüt: “siguem qui som”.
Joan Ferran
¿Quién soy?, Es una de las preguntas más transcendentes que podemos realizarnos dado el impacto que puede tener en nuestras vidas. Seguramente nos surge en momentos en que detectamos ciertas incoherencias en nuestro comportamiento. Sin embargo, algunas personas puede que nunca se hagan esta pregunta. Generalmente, lo que sabemos de nosotros es quien creemos que somos, no quien somos realmente. Uno de los aspectos distorsionantes es la confusión entre lo que siento y lo que soy, el pensar que lo que siento soy, ello nos lleva a reprimir emociones o bien ocultarlas, haciendo que nos manifestemos de una forma que realmente no somos, esto sin duda nos generará angustia. Es aquí cuando podemos encontrar ayuda en la descripción de ¿Qué significa ser yo? (para mí el punto más relevante del artículo), y leyendo lo que significa nos damos cuenta de que es muy difícil el ser yo al 100%, y siempre aparecerán ‘zonas grises’ que podemos trabajar para mejorar, y lograr mostrarnos como realmente somos, alcanzando una coherencia plena que nos proporcionará equilibrio y paz interior.
Ana Sánchez Castillo
Muy bueno el artículo, una lección magistral, Hermínia.
Destaco un par de frases: “Cuando puedo expresar mis verdaderos miedos inicio el proceso de transformación para ser quien realmente soy”. A mi personalmente me resultó sorprendente en cierta ocasión, confesé mi miedo y me sentí más fuerte; porque paradójicamente aceptas que esa persona eres tú, la que tiene la inseguridad, el miedo, y reconocerlo te hace auténtico, real y fuerte.
O esta otra frase: como me siento NO me define; siento emociones, pero yo no soy mis emociones, no me definen, porque soy capaz de aceptarlas y de regularlas. Y al aceptar nuestras emociones “nos responsabilizamos de nosotros y de nuestros sentimientos, decisiones y resultados”. Podemos experimentar miedo y al ser conscientes de ello el miedo deja de tener poder sobre nosotros, al tomar distancia podemos encontrar en nosotros mismos otros sentimientos que nos ayuden a equilibrarnos. Todo pasa por aceptar el dolor, atreverse a sentirlo, y la verdad es que estamos entrenados para lo contrario. Conozco a gente que se toman una aspirina cada vez que sienten una mínima molestia e incluso un paracetamol para dormir! El dolor está ahí, forma parte de nuestra vida y deberíamos aprender a vivir con él, a mirarlo a la cara. Y lo mismo ocurre con la frustración, cuanta frustración somos capaces de encajar? Cómo nos sentimos cuando estamos frustrados por algo? Cuantas adicciones tienen su origen en no saber encajar la frustración?
Este video me recuerda la idea de quienes somos y la importancia de aceptarnos tal como somos, espero que os guste!
https://www.youtube.com/watch?v=vSTt5OLBUUs
Diana Sánchez Casanova
Me ha parecido un artículo muy interesante y profundo, que además me resuena mucho a nivel personal a raíz de ciertos acontecimientos de mi vida el año pasado. Hay muchas cosas que me gustaría comentar, pero destaco sobre todo una: la importancia de ser autoconsciente para poder cambiar.
Vivimos detrás de máscaras desde el mismo instante en que nacemos. Unas veces las elegimos nosotros, mientras que otras nos vienen de fuera y las asimilamos como propias. Esto no es en sí malo, al contrario, las máscaras forman parte también de nuestra identidad, de su carácter social. Pero como bien dices, cuando queremos y no nos sentimos capaces de quitarnos esa máscara, cuando la máscara se convierte en aquello que precisamente nos bloquea, es cuando surge el problema y, con ello, el malestar.
Para poder cambiar y ser quien realmente eres, primero hay que darse cuenta de qué máscara llevas puesta y qué es lo que hay detrás. La clave la hallamos mirando en nuestro interior, dejando de lado los juicios y la culpabilidad, dispuestos a aceptar y abrazar todo lo que pueda surgir. Sólo sabiendo quiénes somos en ese momento podremos decidir quiénes queremos ser.
¡Muchas gracias, Herminia!
RAQUEL GARCÍA
“Ser quien realmente somos” parece que debiera ser algo sencillo, sin embargo la mayoría de las personas nos escondemos tras una máscara para mostrarnos a los demás según unos estándares de perfección que nosotros mismos hemos establecido.
El temor a no cumplir con las expectativas de los demás sobre nosotros y por tanto a defraudarlos y no ser merecedores de su aprecio/amor y validación nos lleva a ocultarnos tras esas armaduras tan pesadas. ¡Qué alivio cuando, tras un proceso de autoconocimiento uno se da cuenta que no tiene por qué ocultarse más, que puede permitirse sentir lo que siente y mostrarlo porque en realidad nadie tiene que valorarnos y apreciarnos mas que nosotros mismos!
Es curioso que algo tan sencillo aparentemente como es el aceptar los propios sentimientos de uno ante una situación determinada ha sido para muchos de nosotros algo imposible de aceptar por nuestra mente y nos hemos mostrado de un modo muy diferente al que nos sentíamos en realidad. ¡Y cuánto sufrimiento ha provocado esta actitud! Muchas veces sólo una gran crisis nos hace pararnos y replantearnos quién somos en realidad. Benditas crisis ésas que nos hacen despertar y elevar nuestra conciencia a niveles que no hubiéramos podido imaginar antes.
Gracias por el artículo Hermínia, y por tus sabias preguntas.
Aida
Realmente que difícil es contestar a la pregunta de quiénes somos, algo que aparentemente debería ser muy sencillo y lo que nos puede llegar a costar.
Es de valientes plantearse estas preguntas seriamente y trabajarlas una y otra vez para tomar conciencia de quiénes somos y quiénes queremos llegar a ser.
Aunque ha sido un proceso complejo, que ha requerido de dolor y aceptación en muchos momentos, este primer curso del Máster en Liderazgo Personal y Coaching Teleológico ha sido un año de respuestas a todas estas preguntas.
Gracias a todos los que me habéis acompañado en este proceso, ahora queda lo que me parece más difícil todavía: pasar a la acción!!
Empezar a practicar para llegar a ser unos grandes profesionales!! ..y dejar atrás el miedo, ese maldito bandido!!
Gracias a tod@s mis compañer@s y profesor@s por su escucha, paciencia y presencia!!
Me quedo con una pregunta para reflexionar:
¿podemos nosotros aportar algo a esta sociedad para que estas máscaras desaparezcan y cada uno pueda contestarse a sí mismo quién es realmente?
Irene Palacios
Herminia, estoy de acuerdo con las compañeras en la belleza de este artículo. Gracias!
Es el más retador que he leído de tu lista. Precisamente porque es inevitable reflexionar y mirar hacia dentro. A la vez, me ha producido una gran tristeza, explico el por qué un poco más adelante.
Yo me detengo en un párrafo que empiezas con la pregunta: “¿Qué les impide ser quiénes son?”
Que levante la mano quien nunca se ha refugiado en su personaje por el temor a no ser amado, valorado o no ser lo suficientemente bueno para cubrir las expectativas del otro. Basta que sea en el momento de seducción en el que nuestra máxima prioridad es agradar a la otra persona. El resultado es que utilizamos esa máscara que creemos que nos protege o nos ayuda para alcanzar nuestros objetivos.
Estamos aprendiendo ahora, a estas alturas, a expresar nuestros miedos que como bien dices Herminia es el inicio de transformación para ser quien realmente somos. Repito, ¿para ser quien realmente somos? ¿No esto surrealista? Y la tristeza de la que os hablo viene porque el mundo, el entorno y los líderes que lo manejan no están preparados para recibirnos como realmente somos.
Vamos a partir de la premisa que es porque no saben cómo hacerlo. Lo cierto es que en gran parte de la realidad que vivimos mostrar la vulnerabilidad y las inseguridades o miedos es interpretado como síntoma de debilidad.
Afortunadamente cada vez somos más y da gusto ver que hay más abertura para conversar en confianza y abiertamente. Para mí ha sido muy reconfortante experimentar en este año de Master que para progresar y ser mejor persona necesito al otro. Aquí es donde también pones luz tú Herminia,no hay duda de que nos queda trabajo a nivel personal y profesional para acompañar como Coach queridos compañeros!!
Sara Berrocal Valenzuela
De los artículos que he leído hasta ahora al respecto he de decir que es el que más me ha impactado. Creo que define claramente el hecho de ser alguien que realmente no somos. Nos llegamos a creer ciertos roles o bien por que la sociedad así los estima, o bien porque a las personas que nos rodean es lo que esperan de nosotros. El saber quien soy es algo que me ha costado mucho tiempo averiguar, cada situación de la que aprendo me hace ser diferente. La cuestión es aceptar que ya no eres el que eras que tienes el poder de ir en la dirección que ahora, en este momento te hace feliz y te hace sentirte pleno contigo mismo.
El miedo y la baja autoestima son dos factores fundamentales que hacen que nos pongamos esa barrera, y nos quedemos rondando un área que siempre fue cómoda, aunque ahora no sea la que realmente me llena. No siempre este hecho llega a la consciencia, es por eso que cada día debemos preguntarnos si somos felices, quien soy, quien quiero ser y qué necesito para ser quien soy. Puede que nos sorprenda y nos demos cuenta de que soy otra persona diferente al rol que estoy ejerciendo, o que ayer si era yo y hoy no considero que lo esté siendo. Pero la vida es movimiento, dinamismo, sentimiento, sensaciones… que no son Yo. Yo soy cómo vivo esas sensaciones en un momento concreto pero yo no soy esa sensación. Al ser humano le cuesta diferenciar. Bajo mi punto de vista, darse cuenta de que lo que me ocurre es distinto a quién soy no es lo complicado, lo que sí es complejo es tras darnos cuenta pasar a la acción para ser quienes somos y tomar las nuevas riendas de nuestra vida.
El secreto de la felicidad es saber quiénes somos. Merece la pena invertir tiempo en averiguarlo.
María Boggiero
¡Que belleza! Ser quien soy requiere valentía y humor, y es un precioso regalo a hacernos a nosotros mismos. En otro artículo nos invitabas a reflexionar cuál es la mejor pregunta que nos han hecho, una de las que recuerdo más vívidamente fue la de un amigo, que sin comerlo ni beberlo, ni ninguna aparente razón me preguntó: ¿de qué te escondes?, …¿yo?, ¿esconderme?, no tenía conciencia de ello, pero “ello” pintó mi cara poniéndome roja como un tomate. A partir de ahí y con la pregunta resonando en mi mente, me fui permitiendo emerger poco a poco, dejándome ver, ¡qué susto!, y riendo al mismo tiempo dotando de humor instantes en que me descubro extraña a mí misma, expresando emociones, sentimientos, sueños… en ese emerger descubro que ciertamente la autenticidad y la aceptación son las aliadas para el cambio y la coherencia, y que de la mano de ellas va la conciencia, observo quien soy y decido quien quiero ser.
Tomo nota del artículo de que en situaciones en las que me sienta incómoda y puedan surgir el miedo o la desconexión, he de parar y preguntarme: ¿Qué estoy sintiendo en este momento?, ¿qué estoy pensando?, escucharme y preguntarme: ¿Qué me estoy diciendo a mí mismo que me hace sentir inseguro?, ¿qué significado le estoy atribuyendo a esta situación?, ¿cómo está reaccionando mi cuerpo?, ¿qué me llega a través de mis sentidos? De esta manera, puedo identificar lo que estoy sintiendo (no lo que es) y lo acepto, elevo mi grado de consciencia y puedo vivir la experiencia sin esconderme.
Dejo un guiño de “ser quien soy” a través de una canción interpretada por Mercedes Sosa con letra del poeta uruguayo Luis Ramón Igarzabal, “Soy pan , soy paz, soy mas…” https://www.youtube.com/watch?v=QxKUtDwVb50
Muchas Gracias Herminia por seguir aportando luz al camino!
Claudia Zapata Caicedo
Hacerse la pregunta de ¿Quién soy? Creo que conlleva una gran valentía y desde luego no todo el mundo se la hace. Hay personas que pasan por la vida de largo, sin querer saber quiénes son y la misión que ello les comporta en la vida…también se dice que son más felices porque no se cuestionan y siempre están en su zona de confort. La verdad es que cuestionarse y conocerse a uno mismo no es tarea fácil, requiere de perseverancia, de mucha sinceridad y coraje, ya que no es fácil aceptar todas las cosas que un solo ser humano puede llegar a ser y a hacer.
Muchas situaciones me han llevado a esta inquietud y aunque es cierto que en su momento no les agradecía el que se produjeran, a día de hoy me siento tremendamente agradecida de que me hayan puesto en un punto crucial en el que me encontraba tan perdida, que solo me quedó hacer un viaje hacia mí misma e indagar y profundizar en zonas de sombras de las que no me sentía nada orgullosa, pero a las que a día de hoy les tengo luz porque también son parte de mí.
Entre más me conozco, más imperfecta me veo, pero a la vez más auténtica y más original, e intento no esconderme porque llegó un punto en que las máscaras y los engaños se quedan sólo para el carnaval. Descubrí que no tenía que ser perfecta para nadie, si no vivir de acuerdo a mis valores y a las cosas que realmente son importantes para mí y alejarme de personas y cosas que solo quieren hacerme ser otra persona con la que no logro identificarme.
Entonces aposté por mí, por desnudarme y mirarme al espejo, por descubrir la vergüenza al escucharme o el miedo al juicio que siempre ha sido más propio que ajeno y entonces las cosas empezaron a cobrar más sentido para mí y la tranquilidad y la paz me fueron invadiendo poco a poco porque cuando me acostaba no había engañado a nadie, pero sobre todo, no me estaba engañando a mí misma. Y aquí estoy, intentando seguir en este camino difícil pero gratificante e intento ser, como muy bien ha dicho K. Rogers, un miembro original de la especie humana.
Rosa Mari
Qué hermoso Herminia, lo que he sentido leyendo tu artículo!
Tras décadas de existencia, una existencia programada en la que mi rol era tan fácil como seguir lo que de mí se esperaba sin embargo, no me sentía plena y aun así, aceptaba cómodamente.
En un periodo puntual de mi existencia, la vida que es sabia y seguramente por esa misma razón cambió el diseño de mi programa. En ese momento sentí, como nunca, caer en el abismo. Sentía con dolor que estaba viviendo en un lugar que no me correspondía que representaba un rol que no me pertenecía y lo peor de todo, no tenía ni fuerzas ni herramientas para cambiar mi escenario. Fue en ese justo momento que la vida me brindó la oportunidad de conocer el Coaching Teleológico y allí comenzó la larga, difícil, profunda, emocionante y a su vez desconcertante e incluso dolorosa búsqueda de respuestas a la pregunta ¿QUIÉN SOY YO?
A medida que iba descubriendo quien soy, comenzaba a saber que quería y a su vez podía decidir más acertadamente. Porque conociéndome puedo identificar cuál es mi función, mi lugar en este mundo, dónde está mi verdadero valor, qué tipo de vida me corresponde y qué necesito para realizarme plenamente.
Hegel dijo: “El hombre moral no es meramente aquel que desea hacer lo que es correcto y lo hace, ni el hombre sin culpa, sino aquel que es consciente de lo que está haciendo”
Soy consciente de que aun no tengo plena respuesta de quien soy sin embargo, ahora estoy ilusionada recorriendo ese largo y profundo viaje hacia mi interior porque tengo claro lo que dice Carl Jung, “Tu visión devendrá más clara solamente cuando mires dentro de tu corazón… Aquel que mira afuera, sueña. Quién mira en su interior, despierta.”
Muchisimas gracias Herminia, la lectura del artículo me ha despertado una vez más una inmensa gratitud hacia ti, que encendiste mi luz interior e hiciste que brillara dentro de mí.
Mònica Morales
Una de las preguntas más difíciles de responder ¿Quién soy? No nos preparan para saber las respuestas a este tipo de preguntas y cuando alguien decide preguntarse que difícil me parece la respuesta…y tal vez si somos capaces de quitarnos todas esas máscaras que nos hemos ido poniendo a lo largo de nuestra vida, que bonito, fácil y sencillo se vuelve todo. Todavía no sé quien soy y espero siempre tener ilusión por seguir aprendiendo a saber de mi, a ir despojando mis máscaras. Pienso que una vez entras en esa rueda cuan difícil es salirse de ella, y más me apasiono por aprender ¿Quién soy?
Gracias por el artículo.
Paula Folch
Cuando hablo del ser me quedo sin palabras. Incluso el YO es una identificación. Me quedo con el SOY. Y quién soy? No hay palabras. Es la experiencia directa de lo que estoy sintiendo en el ahora, abrazando cada sensación, sentimiento y emoción y regularla en nuestro beneficio.
Creo firmemente que un proceso de cambio se basa en la transformación: cuestionar la máscara de la persona (creencias e identificaciones del ego -que tanto lo necesita para sobrevivir-) y dar más luz a la verdad del ser para que cada ser humano se acerque más a su esencia y aprenda a vivir desde ella. Expandiendo el ser, la comprensión y el entendimiento pierden buena parte de sentido, es subordinar el pensamiento en beneficio de la emoción y no al revés.
Uno de mis propósitos de vida es este, vivir y acompañar a vivir desde la consciencia como puerta de entrada al ser.
cristina espallargas
Cuanta verdad hay en todas tus palabras, y cuanto sufrimiento produce el no saber quienes somos, en autojuzgarnos, en querer cumplir expectativas que no son propias, ajustarnos a las normas, a los cánones oficiales.
Y paradójicamente, cuanta liberación en aceptar que somos magníficos, o sencillamente que tenemos derecho a ser como somos, únicos e irrepetibles, que nadie nos puede ni debe decir cómo vivir nuestra vida, que nosotros podemos y debemos bucear hasta hallar nuestra esencia y ser fieles a esa llama interna que nos habita a todos con el único límite del respeto a los demás. Aceptarnos, quitarnos la venda, curar nuestras heridas sin hurgar en ellas, cambiar lo que se pueda, querernos, mirarnos sin miedo en el espejo y salir al mundo a SER.
cristina espallargas
Cuanta verdad hay en todas tus palabras, y cuanto sufrimiento produce el no saber quienes somos, en autojuzgarnos, en querer cumplir expectativas que no son propias, ajustarnos a las normas, a los cánones oficiales.
Y paradójicamente, cuanta liberación en aceptar que somos magníficos, o sencillamente que tenemos derecho a ser como somos, únicos e irrepetibles, que nadie nos puede ni debe decir cómo vivir nuestra vida, que nosotros podemos y debemos bucear hasta hallar nuestra esencia y ser fieles a esa llama interna que nos habita a todos con el único límite del respeto a los demás. Aceptarnos, quitarnos la venda, curar nuestras heridas sin hurgar en ellas, cambiar lo que se pueda, querernos, mirarnos sin miedo en el espejo.
Pol Rodríguez i Salvador
Hola a totes i tots;
Gàcies Herminia per aquest article.
Pel que eh entès, explica amb claredat la relació directa que hi ha entre la pressa de conciència (que ‘tant desitgem en un procés’) i el canvi.
En aquest article acotes la conciència al camp del fer: «conscients del que fem i les raons per les quals fem el que fem». I per arribar a aquesta conciència ho fem a través del coaching teleològic que ens «ajuda a pendre conciència de les creences i enfocaments que dificulten aquest canvi i ens impedeixen ser qui realment som». És a dir, sobre les creences per arribar al ser.
Resumit, entenc per l’article que el canvi es dóna quan som conscients del que fem, com a primer pas per a anar veient que aquest fer forma part d’una corretja transmisora juntament amb les nostres creences i en última instància el nostre ser, i que qui determina la manera de funcionar i ser és aquest sistema de creences.
Així doncs, el canvi depèn del ser conscients de que la nostra existència esta condicionada per les nostres creences, i aquestes ens fan representar un rol. Aquesta nova visió permet deixar d’identificar-nos amb el rol/màscara -no som, actúem- i passem a ser concients de que el que estem fent és protegir-nos per por a no cumplir unes espectatives -uns supòsits- del que hem de ser, creades per nosaltres a través del nostre sistema de creences (com que creiem que no som prou pel món exterior, ens inventem una disfressa per aparentar que sí que ho som, i no decebre a ningú. Amb el temps, tampoc a nosaltres).
És amb aquesta acceptació que podem aconseguir canviar; reconeixent la màscara i la seva finalitat és el punt de partida per a treballar la persona que volem ser i que fins ara no acceptavem la seva existència per creure que no encaixava/no era suficient.
La «lluita interna per cobrir unes espectatives del que hauríem de ser» amaga el nostre ser essencial, i es protegeix darrera de mecanismes d’autodefensa per a no fer-lo.
Es com si passésim de viure la vida a representar una obra de teatre en la que el nostre paper està condicionat pels decorats, les i els personatges secundaris, i el guió que ens dónen. Depenent d’aquest elements, nosaltres utilitzarem una disfressa a un altre per a poder representar la perfecció el nostre paper, el nostre personatge.
La capacitat de no creure’ns SER aquest paper, i per tant, reconéixe’ns la por, ens permet entendre que és una emoció o sentiment que forma part de nosaltres però que no ens defineix. I en el moment que acceptem que aquesta emoció/sentiment forma part d’un conjunt d’emocions més és quan tenim la capacitat de veure que els podem combinar i equilibrar.
Així doncs, la consciència és la primera etapa del canvi real que volem per tornar a ser qui som i volem ser.
Gala Guasch
¿Quién soy? Seguramente una de las preguntas más difíciles y qué más veces nos hagamos en la vida, aunque depende de cada uno de nosotros de la profundidad que le queramos dar. Para llegar a escarbar hasta la identidad necesitamos un largo proceso de autoconocimiento para poder reconocer los valores que nos guían en cada área de nuestra vida, auto-observarnos en cada uno de los roles que tenemos (como hija, como pareja, como estudiante, como profesional, como amiga…), saber cuáles son los temas personales que nos cuestan, las creencias que nos limitan, las fortalezas que tenemos, los puntos de mejora, los hábitos que tenemos y lo que dicen de nosotros mismos, los hobbies que nos apasionan, los sueños que tenemos, las máscaras que nos seguimos poniendo, los miedos que nos paralizan, el propósito de vida, nuestro autoconcepto, nuestra autoestima, nuestras decisiones, nuestros estilos comunicativos, los modelos que nos guían, nuestro diálogo interno, nuestra conciencia, nuestra manera de sentir y de hacer… Estos serían ejemplos de lo que componen nuestro yo. De esta manera como vamos creciendo iremos absorbiendo más experiencias y más aprendizajes por lo que iremos cambiando alguna de las variables mencionadas y por lo tanto ya no seremos la misma persona que hace un tiempo. Aunque la esencia de uno se mantenga en el tiempo, el crecimiento personal ayuda a pulir las impurezas de nuestro carácter para ser nuestra mejor versión según la etapa de la vida en que nos encontremos y nos podamos ir superando.
Me ha gustado mucho la frase de Kierkegaard de “la vida puede ser comprendida mirando hacia atrás, pero ha de ser vivida mirando hacia delante”, es decir que soy quien soy por las decisiones que he tomado en la vida pudiendo entender la responsabilidad de mis acciones, pero a la vez tomo decisiones en el presente que me pueden alejar o acercar a lo que quiero conseguir en el futuro y en mi propia proyección. Me quedo también con los puntos de “ser comprensivo y no juzgarse a uno mismo” y “Atreverse a ser sincero y honesto con uno mismo”, ya que tendemos a juzgarnos por lo que hacemos o no hacemos siendo muchas veces nuestro propio boicoteador o bloqueador para conseguir lo que queremos, como también el ser sincero con uno mismo ya que muchas veces nos mentimos a nosotros mismos, nos infravaloramos o nos conectamos con el orgullo, por lo que hay que saber dominar estos aspectos para tener una relación más sana con nosotros mismos, aceptarnos y así sentir una autoestima más acorde con lo que realmente somos.
Eliana Valencia
Una de las mayores preguntas de la vida, creo que de tanto en tanto nos la hemos planteado y que la respuesta ha ido siendo diferente, tal como lo dices, porque la pasamos de puntillas o porque aún estamos aferrado a un rol determinado. Esa sensación difícil de describir pero que es como una vocecita que te dice, esto no eres tú. Así como el grillo de Pinocho, que en momento de tu vida te habla, pero estamos tan enganchados con lo que sabemos hacer, que a veces no la escuchamos.
Pero hay momentos en la vida que esta pregunta empieza a surgir más fuerte y es donde estamos listos para tomar conciencia y buscar nuestra verdadera identidad. Y a medida la vamos descubriendo, en cada decisión que tomamos, actitud o respuesta que damos, hay una nueva sensación de coherencia o de paz en nuestro interior. Es cuando sabemos que actuamos por medio de nuestro verdadero ser.
LUCIA OLAZABAL
“Puedo verlo en tus ojos. Tienes la mirada de un hombre que acepta lo que ve, porque espera despertarse. Irónicamente, no dista mucho de la realidad. ¿Crees en el destino, Neo? – No, no me gusta la idea de no ser yo el que controle mi vida.” https://www.youtube.com/watch?v=SJrkhNskaUs Este es el diálogo anterior al video que les acabo de dejar. Es la elección de la pastilla azul o roja de Matrix; (la persona que no vio esta película, se la recomiendo). Algo no está bien con nosotros pero ahí seguimos, identificándonos con lo que en algún momento compramos que necesitábamos para ser felices. A la pregunta ¿alguna vez me había sentido así?, la respuesta es un rotundo Sí. Recuerdo una gran crisis existencial hace unos años. En relación a esta, en una clase de Carles, hicimos una metáfora de lo que éramos, somos y queremos ser. Yo me plasmé como un rascacielos derrumbado y ahora una casa con fuertes cimientos. Necesitamos ser rascacielos para que nos vean, nos acepten, nos reconozcan, nos adulen. En el fondo, sabemos las desventajas de ser rascacielos; luchar contra el clima, fortunas en gastos de mantenimiento, promoción constante. Pero soy un rascacielos y todos lo ven. No estoy haciendo un paralelismo al éxito. El éxito es otra cosa, no necesita edificarse ya que está en todos lados. ¿Acaso alguien necesita vivir en un rascacielos?, no conozco casos ni de magnates, (igual sí), pero la necesidad no va de la mano de una vida abundante. Expongo esta reflexión desde el más profundo sentimiento de cariño. Porque si alguna vez me sentí así, fue porque no sabía que no tenía que hacer nada para que me quieran. Que no pasaba nada si cambiaba de opinión, que no era menos responsable si reía, ni carecía de fortaleza si dudaba. No tenía ni idea de quien era, de hecho, nunca me había hecho esa pregunta. Un buen día, se derrumbó todo y viví mis mayores juicios. No tenía otra opción, o se trataba de una exorcismo o quizá yo no era quien pensaba. Aun continúo en el camino de esta respuesta, pero suena cada vez a un nuevo amanecer.
“Cesa de definirte: concédete todas las posibilidades de ser, cambia de caminos cuantas veces te sea necesario.”
(Alejandro Jodorowsky)
Raquel Gómez
Herminia este ha sido, especialmente, mi artículo preferido hasta ahora. Después de leerlo varias veces, durante varios días, y después de recoger lo máximo posible e integrarlo, ratifico que éste, es un artículo no deja indiferente. Considero que ser uno mismo es básico y esencial para poder ser felices pues, ¿cómo vamos a ser felices si no sabemos quiénes somos en realidad? Mientras iba leyendo el artículo, me venía en mente la visualización que realizamos en el seminario pasado, sobre los panegíricos que desearíamos que nuestros más allegados pronunciaran el día de nuestro funeral. Después de toda la movilización de sentimientos que hubo después de tal ejercicio, me llevé trabajo a casa para poder integrar todo lo removido durante la práctica. La pregunta que me rondaba en mente era ¿Si quiero que toda esta gente diga todo esto de mí, qué tengo que cambiar? ¿En qué punto me encuentro, cómo soy ahora? Así que con lápiz en mano y papel, me dispuse a listar todo lo que me venía en mente. Después de varios minutos analizando el listado de palabras, realicé que muchas de éstas no eran adjetivos que describían quién soy yo realmente en esencia, sino que, como bien has expresado en este artículo Herminia, son adjetivos situacionales relacionados a un contexto específico, emociones que se experimentan por condicionantes, que deben ser aceptadas e integradas, pero que, al fin y al cabo, no nos definen.
Después de meditar varios días sobre esto y después de leer varias veces este artículo, he concluido que, de un modo plenamente consciente, solamente YO puedo elegir quién soy y cómo quiero ser en cada momento de mi vida. Así que una vez más, gracias Herminia por ayudarme llegar a tal contemplación, pues estoy plenamente segura que me ayudará a conseguir mi objetivo, ser la persona que realmente soy.
FELIPE ATEHORTUA
Magnífico post! mensajes muy potentes para reflexionar, grandiosa la mezcla de emociones que despierta la pregunta ¿Quién soy? Entre el miedo a no ser quien espero ser, rabia por no ponerlo en marcha, curiosidad por no saber del todo quien es ese que mi mira en el espejo…
Hace algunos años descubrí unos artistas dentro de un género musical minoritario en España (rap en castellano) que me llamó mucho la atención por lo que dicen y como lo dicen, uno de ellos tiene una breve historia que habla de “tu isla desierta”:
https://youtu.be/I7pIf5MSWL4
Te cuestiona ¿cómo serías si de repente aparecieras en una isla desierta?, ¿Seguirías siendo como hasta ahora? ¿De verdad todo lo que haces, dices, piensas y sientes viene de ti y tu experiencia y vivencias? O ¿alguien lo ha decidido por ti y sin darte cuenta lo has asumido como tuyo?
El ¿Quién soy? es un tema que puede dar para muchos post… quizás es la puerta para un cambio o quizás simplemente sea un horizonte al cual nunca hallaremos respuesta pero si deberemos luchar por acercanos.
ANNA GIRBAU MORENO
En algún momento de mi vida pasé por una crisis existencial, lo llamé la crisis de los 20, donde te planteas quién eres, hacia dónde estás yendo realmente, qué has venido a hacer y cuál es tu propósito en la vida. A día de hoy hay preguntas que siguen estando, pero las planteo de otro modo. Conforme te vas conociendo más, esas dudas vuelven a surgir, pero ya no eres la misma persona que se las cuestionó por primera vez. Entonces, ¿quién eres en realidad? ¿nunca nos terminamos de conocer? ¿somos como una cebolla que se va quitando capas? o ¿somos una persona distinta, una nueva versión de nosotros, que se ha transformado?
Al principio de hacerme estas cuestiones, me veía como una cebolla, una persona que a más se conocía y más capas superficiales se sacaba, más lograba adentrar en su interior y más se conocía. Pero ahora, lo veo distinto, es cierto que quitarse capas de la cebolla ayuda a conocerte, a adentrar en ti misma. Pero cuando cambiamos, nos transformamos y ya no somos la misma persona de antes. Hemos dado un paso más para llegar a ser quien realmente somos. Mientras tanto, representamos un personaje o un rol, con el que nos hemos acomodado, pero no implica que nos sintamos a gusto. Ya que ese personaje, nos ayuda en circunstancias, pero nuestro ser sabe que nos somos esa persona en realidad. Y se crea una disonancia entre quien siento que soy en realidad y lo que estoy siendo o creo ser en este momento. A veces, por más que intentemos conocernos, por lo que creemos ser o por lo que nos dicen ser, eso no habla de nosotros, habla de nuestro rol, de nuestro personaje en este momento de nuestra vida.
Conectar con quien somos en realidad, no es tarea fácil, pero porque nunca antes nos han hecho reflexionar quién somos, qué ser queremos mostrar, o incluso definir quién somos, se nos hace un ejercicio muy complicado, que intentamos rechazar, porque nos provoca angustia no saber qué decir, o dudar sobre nuestro propio yo. Y es por ello que llega una edad en que surgen esas dudas, dejamos de señalar al otro y nos damos cuenta de que no nos hemos planteado nuestra existencia antes. Aprovechar la oportunidad que ofrece el coaching teleológico para crecer, y conocerse a uno mismo es una experiencia que no hemos de rechazar si queremos despertar aquello que está en nuestro interior.
Sólo uno mismo puede saber lo que es en realidad, dentro de un cuerpo que adoptamos, para poder llegar a mostrar de la mejor manera nuestro verdadero ser. Solamente dejando nuestro ego de lado, y conectando con el amor, lograremos saber quien somos en realidad. La máscara la pone nuestro ego, para protegernos de los demás egos que nos rodean. Pero si somos capaces de liberarnos de las máscaras, veremos que en realidad no estamos tan separados unos de otros como nos creemos. Y viviremos una vida plena desde la libertad de ser quien realmente somos.
Gracias Herminia, una vez más por ofrecernos reflexiones existenciales, para que salga nuestro verdadero ser.
Andrea Gomes
Para mi, ser la persona que realmente soy es la mas pura y verdadera forma de liderar mi propia vida. Descubrir quien realmente somos es un trabajo de autoconocimiento, reflexión, toma de consciencia, y, el coaching teleológico, con sus preguntas poderosas y la conversa, es una herramienta poderosísima para ayudar los clientes a desvelaren estas mascaras, identificar y aceptar los sentimientos, descubrieren quien son y, además, también se empoderaren, y, con mas auto estima y confianza, ponerse en marcha para actuar de manera a ser quien realmente son, y vivieren de acuerdo con sus valores, sus sentimientos y su propósito de vida.
Silvia Quirós
Tal cual lo indica el artículo en uno de sus puntos a veces la respuesta a quién somos es algo que llega con la madurez. Si bien no son todas las personas quienes experimentan la libertad que dan los años para mostrarse sin temor con sus virtudes, defectos, y la seguridad suficiente para minimizar la presión externa de ser otros, así como la fuerza interna para luchar contra todo lo que te impide ser vos mismo, decidirse a ser uno mismo y estar cómodo en el pellejo es un acto de valientes, y de arriesgados. Todo tiene un costo. Pero quienes desean con todo su corazón alcanzar su máximo potencial y autenticidad están dispuestos a pagarlo. Ser nosotros mismos exige liderarnos. Por momentos ser autocráticos, principalmente en el caso de las mujeres y la socialización a la cual se nos ha sometido. Ser nosotros exige locura, exige recursos, y muchas veces promete gran soledad en el camino, porque al resto de personas les cuesta comprender tu capacidad de afrontar lo que ellos no se atreven. La vida está llena de momentos para conectar con nuestro verdadero ser. No los dejemos escapar, que el tiempo es poco.
Ricardo J. Rincón
Dentro de un proceso de coaching lo primero es liberarse de esos temas internos que nos bloquean para descubrir quienes somos. Se escucha facil pero en la práctica requiere mucha valentia para enfrentar esas situaciones que nos provoca miedo y no nos deja crecer. El sentimiento que se siente no lo puedo describir, toda esa carga emocional que hace surgir a ese ser nuevo que realmente somos. Con miedo si pero conciente que lo puedo superar, en cuanto pasa este cambio cambia el paradigma de nuestra realidad y futuro éxito.
Mª del Carmen Pérez Fuente
Cada vez soy más consciente de que la gente vamos por la vida sin saber quiénes somos en realidad. Eso es algo que pude experimentar al empezar el Máster de Coaching y a lo largo de él. Al principio pensaba: «¡Ostras! esto y aquello no me lo había parado a pensar» y a medida que íbamos avanzando, la cosa fue cambiado y vi que había cosas que tenía que trabajarme de mí misma porque me resonaban y algunas incluso sentía que me hacían pupita. Poco a poco fui siendo consciente de lo poco que me conocía a mí misma y de las cosas inimaginables que estaba llegando a descubrir y que estaban tambaleando mi vida y mi mundo en esos momentos. También, fui aún más consciente de la gran labor que los profesionales del Coaching pueden hacer en momentos como esos. Por eso, doy las gracias al Coaching y a los profesionales del Coaching por existir.
Gracias.
Amanda
Me gustó mucho el artículo y el tema en general. Es una pregunta existencial que realmente he llevado conmigo a lo largo de mi vida. Me hace recordar una frase que dijo María de los Ángeles respecto al ejercicio del «Don» este fin de semana, en cuanto a que tenemos dentro de nuestra propia alma las características de quienes más admiramos. Es decir, podemos ser lo mejor de nosotros mismos según lo que más valoremos de los demás. Esto también, encuentro, se relaciona a lo que se concibe como espíritu en el TAO. El espíritu lo poseemos todos. Es virtuoso y puro por naturaleza. Se contamina, pero lo podemos «recuperar» a través de la práctica de las virtudes, siempre en relación con un otro.
Carolina Ríos
Que buen documento Herminia! Muy interesante leer esto ya que creo que es algo que les pasa a todas las personas en su vida, algunos más y a otros menos. Sin embargo es tan importante poder conocerse uno mismo para reconocer sentimientos, deseos, conductas, etc y así poder trabajar sobre ello.
Que importante es ir conociéndose a uno mismo y poder mostrarse en los ámbitos de la vida tal y como uno es, ojala sin mascaras o con la menor cantidad posible. Esto te ayuda a realizar tus metas ya que tu mismo vas camino a ellas sin tener que ocupar un disfraz.
Creo que mientras más uno se pregunta, más posibilidades de crecimiento hay. Quizás nunca encontraras todas las respuestas que necesitas, pero si vas tomando conciencia de quien eres y de que quieres.
Angélica Mera Garrigó
Vaya artículo este que has planteado Herminia!!
No soy capaz de comentar a través de las palabras hiladas de manera común. Siento que su complejidad es tal, que me solicita recurrir a otros elementos para dar cuenta de lo que quiero comentar. Espero no se malentienda. No es dejar ser quien soy. Es porque soy quien soy, que uso este recurso.
Cita 1: «Ese yo que el mundo me ha dado perecerá al consumirse las mentes en que vive, apenas quedaría de él más que un nombre. ¿Cómo viviendo con ese yo, no iba a temblar ante la nada?. Pero el yo mío, el que tú sacaste de la nada vivirá en Ti. Se extrañarán del cambio, sin observar que no hay tal cambio ni de frente, ni de costado. Lo que hay es que el Miguel que ellos conocían, el del escenario, ha muerto y al morir ha dado libertad al Miguel real y eterno, al que ahogaba y oprimía y eso que esa es la fuente de todo lo bueno del muerto.»
Cita 2: «¡Conócete a ti mismo!», decía la inscripción, y Carlyle dice: ¡No, eres incognocible, conoce tu obra y llévala a cabo! Y ¿cuál es mi obra? Hay algo más que conocerse (o llevar a cabo su obra) y que amarse y es, serse. Séte a ti mismo, sé tú mismo y como eres nada, sé nada y déjate perder en manos del Señor»
Ambas citas de Miguel de Unamuno.
Elena R. Laguna
Gracias a Herminia y a todos los que han comentado. Es alentador saber que gracias a las aportaciones de muchas personas a lo largo de la historia de la humanidad, cada vez comprendemos mejor cómo sentimos, cómo pensamos y cuáles son las trampas en las que podemos caer que nos provocarán malestar. Y la trampa de ponerse una máscara es una de las grandes, de esas que deberían enseñarnos desde parvulitos: niños, cuidado, que si no andáis con ojo vosotros mismos os iréis poniendo una máscara que luego no os podréis quitar…
Lo surrealista es que, estando tan documentado como está que no nos hará bien, en vez de eso, ya desde chiquititos los mayores nos van «sugiriendo» que ocultemos aquello que a ellos les da miedo… y vuelta a empezar! Se vuelve a crear otra generación de miedicas que no dejarán ser ellos mismos a los nuevos que vengan. ¿Cómo salimos de este círculo vicioso? Ya que tenemos la suerte de saber que es así, seamos valientes! No nos asustemos de lo que somos y así podremos disminuir esa presión que inconscientemente ejercemos sobre los demás.
Constanza Fernández
Ante tan significativa pregunta, solemos identificarnos con nuestros roles, con aquello que hemos alcanzado o que poseemos: un título, una familia, un cargo, un talento. También lo podemos hacer desde nuestra historia, nuestro origen; nuestras heridas y dolores.
Otras veces la definición proviene de la mirada de otro, o de muchos otros que nos fueron configurando una identidad que terminamos por asumir como propia.
Sin embargo, estas respuestas nunca terminan por satisfacer nuestra sed de saber quién realmente somos. He ahí la importancia de detenernos, adentrarnos en nuestro interior y conectarnos con lo más íntimo de lo que sentimos.
Asimismo, este ejercicio nos lleva a un entendimiento más profundo de nuestras decisiones del pasado, brindándonos una oportunidad de encontrar sentido a aquellas experiencias difíciles que se dieron producto de nuestras elecciones, para así aceptarlas y reconciliarnos con nosotros, con el resto y con esa parte de nuestra historia personal.
Sin embargo, en este proceso, también necesitamos las pupilas de otro en quien reflejarnos, y comprender que este camino no es posible llevarlo a cabo en solitario. Que necesitamos la interacción con otros y salir a su encuentro, a pesar de nuestros miedos y encierros.
¿Quién soy? Y a partir de esa respuesta escoger un camino. Pues si no tenemos claro quiénes somos, mucho menos sabremos cuál es el camino que dará respuesta a nuestros deseos y anhelos más profundos. Aquéllos que están en consonancia con nuestra verdadera identidad y que alcanzarnos, nos llevarán a ser la mejor posibilidad de nosotros mismos.
Tatiana Hutinel
Hola, me gusto mucho la siguiente frase:»La paradoja curiosa es que cuando me acepto a mí mismo tal como soy,entonces puedo cambiar» ya que nos lleva a darnos cuenta que el autoconocimiento es muy importante para saber encontrarnos reconociendo nuestros propios sentimientos y reacciones ante lo que vivimos, aprender a ser quien soy en lugar de intentar ser quien no soy, ser quien soy en lugar de negarme a ser quien soy, logrando conocernos para no pensar que necesitamos defendernos y/o despreciarnos y/o sentir culpa…reconciliarnos con nuestra vida, logrando atrevernos a ser sincero y honesto con nosotros mismos…es decir, amarnos como somos..!!!
Que lindo objetivo a desarrollar….
Gracias Herminia, por alimentar mi fotosíntesis….
Cariños desde Australia, Tatiana & Pablo..
Macarena Madariaga Caro
Lo que leí en el artículo resuena mucho con una de las razones por las cuales el coaching teleológico me motiva mucho. Qué agrado tener la posibilidad de trabajar con la potencialidad de las personas y no con la etiqueta del diagnóstico, como me enseñaron en la universidad. En el diario vivir estamos tan acostumbrados a encasillar a los demás y a nosotros mismos, tal vez por una especie de economía mental, y lo que no percibimos es que de esta manera nos cortamos las alas. Zafarse de la discriminación y de pensar que otras personas tienen la respuesta sobre quién es uno mismo, abre el espacio para elegir libremente y de forma responsable lo que queremos ser, dentro de un mundo repleto de opciones. También saber que no somos estáticos y que vivimos en constante proceso de cambio a medida que vamos desarrollándonos,puede ayudarnos a vivir con menos culpa sobre nuestro pasado y ver el futuro siempre con nuevas perspectivas y planes.
Juan
Herminia:
La lectura de este artículo me ha resultado muy inspiradora y de relectura obligada pues tiene muchas facetas para reflexionar y trabajar.
En este comentario me centraré en dos aspectos: la consciencia y el cambio.
Respecto a la primera la cita de Kierkegaard me proporciona un hilo del origen de “no ser quien querría ser”. (La vida sólo puede ser comprendida mirando hacia atrás, pero ha de ser vivida mirando hacia adelante)
Claude Steiner en «Los guiones que vivimos» explica que desde niño recibimos múltiples mensajes de las personas más allegadas y con el tiempo acabamos adoptando algunos los guiones de vida que cita en la obra y que repetimos una vez y otra vez, aunque en diferentes escenarios y actores
Por otra parte, ya jóvenes o adultos nuestra vida relacional, se hace cada vez más compleja y debemos ejecutar múltiples roles. En numerosas ocasiones,
debido a las diferentes demandas que cada uno de ellos exigen, se nos originan conflictos de roles. Una salida que tomamos es priorizar algunos de ellos en detrimento de otros e impidiendo con esto, integrarlos en nuestro ser.
Y es aquí donde el coach puede ayudar a tomar conciencia estas contradicciones y de los mandatos y creencias implícitas que hay en los guiones de vida. Para ello nos podemos valer de las preguntas que planteas al final del artículo y hacer de espejo.
Y una vez somos conscientes sobre lo que queremos ser, hemos de emprender el camino, el cambio. ¿Por qué a veces no lo iniciamos?. El miedo es una de las causas, probablemente una de las principales, Otras vías a explorarnos, tienen que ver con el darse permiso para ser y con la autoestima
maria eugenia
quién soy es la pregunta mas difícil que nos toca hacernos como seres humanos en algún momento, y gracias a Dios la vida nos da cientos de oportunidades para encontrarnos con nosotros mismos. Porque solo conectándonos con nuestra verdadera esencia es que la vida comienza a fluir… cada momento, cada experiencia, cada persona que pasa por nuestra vida pasa a tener un sentido. creo que definitivamente hay que tener mucho coraje para dejar tantas etiquetas y roles que nos ponen los demás y elegir ser coherentes y fieles a nuestro ser, pero sólo conociendo quien realmente soy es que dejo de ser un esclavo del mundo para pasar a ser una persona libre y capaz de ver realmente y dar desde el corazón. Gracias siempre!!
Ares
Qui sóc realment? Quina pregunta més profunda, més única i tant difícil. En la meva pràctica professional em relaciono amb molta gent que porten una carcassa i que el que mostren és aquesta aparença. Són moltes les demandes precisament per a treure aquesta carcassa i aconseguir ser i mostrar-se un mateix.
Com a persona, psicòloga i futura coach…segueixo en el camí de l’autodescobriment, que no és feina gens fàcil. Saber qui som i com ens relacionem és clau per a poder acompanyar als altres. Com a coach és molt important que ens treballem i indaguem en nosaltres mateixos per a poder ajudar als clients a centrar-se en ells i que els seus canvis profunds siguin des del SER i no pas només des del fer.
Moltes gràcies per l’article Hermínia!
Eugenia Moretti
Quien Soy?, ¡que importante pregunta!, como lograr ser nosotros mismos, que lo impide, el miedo a cambiar. Quienes nos rodean esperan que seamos de determinada manera, estamos etiquetados.
Hay normas de conducta aprendidas desde niños, que no nos atrevemos a modificar, que costo tiene reconocer que ello representa una carga, ser responsable, tomar buenas decisiones.
¡Que importante conocerse a si mismo!, sincerarnos y descubrir la postura que nos identifica con nuestras fortalezas y debilidades, ello nos hará confiar en nosotros mismos.
Angélica Vio
Me encantó este artículo, me hace ver que tal vez por eso me siento feliz con mi vida….porque he hecho consciente ese «ser yo», con mis fortalezas y debilidades. En un mundo como el que vivimos hay momentos en que no es fácil, porque muchas veces no hay una preparación para ver y aceptar al otro tal cual es, hemos crecido en entornos donde se oculta el verdadero ser por buscar aceptación.
Hay una frase que me gusta mucho «La felicidad está en la libertad, y la libertad en el coraje.»(Pericles). Vivimos la felicidad cuando nos sentimos libres…. libres de ser, sentir, elegir y para eso se requiere de coraje y respeto por uno mismo y los demás….
ANA
Primero de todo darte las gracias Hermínia por compartir éste articulo tan interesante con nosotros, hay tanto que reflexionar…!!
Para mí lo más importante en éste proceso de cambio y de descubrimiento de uno mismo sería el hecho de darme cuenta de que «no soy lo que siento», que debo aceptar e integrar las emociones y los sentimientos pero éstos no me definen lo que YO SOY.
Por otro lado, darme cuenta de cómo he amado algunas de las máscaras que he utilizado en algunos momentos, como las odio ahora y que difícil es dejarlas a un lado en ciertos momentos o situaciones. Pero que satisfacción llegar a reconocerlas y darte cuenta de que ya no sirven, de que quieres ver que hay más allá, dejando los miedos, aceptando el pasado y mirando al presente hacia el futuro.
Gracias de nuevo!
Sònia J.
El artículo me ha hecho pensar en los diferentes aspectos a trabajar delante de la pregunta ¿Quién soy realmente?, en este caso nos podemos encontrar con la necesidad de trabajar la propia aceptación y autoconomicimiento. Pero me gustaría ir un poco más allá y plantear otra cuestión que es ¿Qué me impide ser yo mismo? delante de esta situación podemos determinar que son nuestros propios miedos, roles sociales impuestos, creencias limitadoras y la negación o ocultación de nuestros sentimientos los que nos puede impedir desarrollar nuestro SER.
Por lo tanto, en un procesos de coaching será necesario que el coachee realice previamente un proceso de autoconocimiento y aceptación de su yo real para poder expresar los miedos que son un obstáculo en el desarrollo de su SER.
Gracias Herminia por compartir tus conocimientos.
Karin Schuster
Creo que tener claro cuál es el propósito en la vida, la contribución individual que cada uno hace en el mundo es revelador. Entender para qué estoy aquí, como puedo aportar para mejorar el lugar en que vivo y me relaciono con otros es clave para potenciar los talentos y ponerlos al servicio de otros. Si todo lo anterior está claro, no hace falta usar caretas. Las caretas existen porque estamos muy centrados en la mirada del otro y algunas culturas son más propicias que otras para crear esta situación. Tenemos que aceptarnos nosotros mismos como somos y animarnos a cumplir nuestros sueños. Tiene que ver con la autenticidad. Ser auténticos, ser nosotros mismos, despojados de prejuicios, miedos y temores. La careta es como una prisión, que nos pesa y no nos permite ser quienes realmente somos. Una vez que nos animamos a quitarnos esa careta, todo fluye de manera natural, casi sin esfuerzo. La siguiente frase es genial: «Cuando nos desprendemos de la obligación de ser lo que los demás esperan o lo que la sociedad considera correcto nos sentimos libres para abandonar el propósito de agradar o de cumplir las expectativas de los demás.» Gracias Herminia!
Ana Isabel Núñez Crespo
Preguntarse quien es uno mismo, es para mí,la pregunta más importante que uno se puede hacer y que personalmente me llevo haciendo durante casi todo mi proceso vital.
Es cierto, a veces las situaciones te llevan a hacerte esta pregunta y en otras surge de forma «natural».
Ser uno mismo,ser fiel a uno mismo,a sus principios a sus valores, al ser más auténtico es todo un reto.En mi caso me está llevando más años de los que pensaba…aunque cada vez soy de las que pienso que vale la pena.
Un proceso que lleva toda una vida dependiendo de la persona es un reencuentro con la esencia de la personita que eras de niñ@ pero con más experiencia.
El proceso Teleológico es realmente un proceso impecable en su forma y fondo. Colocarse a un nivel de «igualdad» desde donde no existe el juicio o los consejos facilita el camino hacia la confianza del coachee.
No ser uno mismo es difícil, incómodo y a la larga enfermizo sinembargo es lo más usual.
Estoy de acuerdo con el ejemplo del DNI. En mi opinión es una gran mayoría los que poseen-emos una foto «trucada» de nosotros mismos.)Sin entrar en las diferentes caras del yo)
Desde los Medios nos invitan a ser «cools» y nosotros mismos…en realidad ese plato hay que ganárselo a pulso.Un mundo hiperconsumista nos invita a todo lo contrario, para así poder «ayudarnos» con compras que compesarán nuestras frustaciones o neurósis.¡Cuidado con este punto!
La idea de liberar la bestia interior es más que interesante y acertada. Excepto casos clínicos o extremos el ser humano es más «bestia» cuando deja de ser él o ella en su esencia.
El momento en que comienza el conflicto del yo posiblemente es en la adolescencia, cuando comenzamos a definirnos y entramos en el mundo «real» de los mayores…
Este proceso varia entre generaciones, situaciones históricas y culturales y procesos familiares.
El lujo de ser uno mism@ es más accesible de lo que parece.Necesita un esfuerzo personal y del grupo, pero sobre todo necesita de la confianza de nosotros en nosotros mismos para poder así comenzar a fluir.
Ser uno mism@ es un no lujo maravilloso en realidad al que tenemos derecho. ¡Qué bonito es no ser otro!(que no contradice a la empatía) Y si es tan bello…¿porqué nos esforzamos tanto en rechazar el regalo más grande que nos ha dado la vida? Nuestra vida, nuestra impronta.
Roser
Em sembla molt important el fet de no amagar els sentiments, ni cap als altres ni cap a un mateix. Tal i com ens va ensenyar l’Alex, permetem-nos sentir el que sentim, qualsevol tipus de sentiment es entiquidor perque t’ensenya quelcom. Que des de petits ens etiquetin i tinguem que cumplir amb aquestes expectatives sense sapiguer si realment es el que volem és una motxila molt pesada que el coaching ens pot ajudar a alleugerar o inclus a que ens deslliurem d’ella.
Moltes gràcies per l’article Herminia
Laura Bravo
Gracias Herminia por compartir este articulo , creo que nos define mentalmente lo que supone conocerse a uno mismo y la gran filosofia / herramienta que supone el Coaching Teleologico para ello. Sinceridad y humildad creo que serian la base para conocernos. Como bien dice Alex Fiol, no se trata de llegar a ser perfectos, a conocer lo positivo que tenemos, que tambien, sino a aceptar tambien nuestras emociones negativas, nuestros sentimientos que van a ser la causa de nuestras acciones y resultados en la vida.Conocerse asimismo es el mayor logro al que un ser humano puede aspirar. Desde hace un tiempo mi objetivo es ser una persona congruente, lograr la congruencia. Ser coherente con lo que pienso, lo que siento, lo que hago…es un objetivo ambicioso, holistico y quizas es mas dificil que jamas me he planteado. Es mi objetivo vital, mi proposito de vida, y el Coaching me esta ayudando mucho en mi arduo camino.No querer ser quien eres , y sobre todo autoconocimiento son la base de una vida integra y congruente. Esta es mi lucha personal. Agradecerte Herminia, y desde luego al Coaching teleologico que es la filosofía de vida que necesitaba , ya que esta forjando los cimientos de mi vida, a mis muy próximos 36 años, nunca es tarde para tener una vida plena interiormente ! A través del Coaching somos capaces de descubrir que creencias nos limitan y cuales realmente nos impulsan ( creencias transformadoras) y personalmente me facilita ese camino hacia la congruencia. Como bien dices es muy potente porque eres TU MISMO eres quien toma conciencia.
La cita que adjuntas de Kierkegaard me trae a la mente este ejercicio de visualizar donde te ves dentro de 15 años … Quien quieres ser, cuales serán tus habilidades,donde estarás, que harás…como bien cita, hay que mirar al pasado, pero nunca perder el horizonte, tu sueño, tu meta.
No es un camino fácil , de hecho es el mas dificil, para mi ni el libro de finanzas ni la inversión más compleja de decidir ha supuesto tanta dedicación, claridad en comprensión y sobre todo fe y pasión. Pero los retos son así, y el Coaching teológico nos lleva de la mano con firmeza, claridad y convicción. Gracias nuevamente Herminia por compartir tus vivencias y conocimientos.
Diana
Este artículo me ha conectado con la presencia esencial de la que habla Miriam Subirana en «el poder de nuestra presencia». Dice: » El valor de lo esencial es todo lo que se refiere al ser, a tu persona… En la dimensión del ser, lo esencial está en la autenticidad, la integridad y la transparencia…»
«Tu presencia esencial es transformadora. Inspira y da la visión de una vida fresca y nueva»
Permitirte ser tu, te permite fluir…
Micaela
Muchas gracias me aclaraste muchas dudas.
Encerio gracias, no sabes lo importante que es para mí.
Saludos desde Argentina
Laura Poch Riquer
M’agradaria compartir amb vosaltres una reflexió entorn a la següent idea: “Cuando puedo expresar mis verdaderos miedos inicio el proceso de transformación para ser quien realmente soy”. Per mi, aquesta frase posa en evidencia que des de la inconsciència no hi ha possibilitat de canvi i per tant, si darrera hi ha un malestar, com sol succeir habitualment, per més que fem fem fem, si no prenem consciència el malestar no se’n va. Queda invisibilitzat i des d’aquí no ho podem transformar, les vegades que ara veig que m’ha costat acceptar les emocions de les situacions ha estat perquè les entenia com a doloroses, i no m’equivocava. Tanmateix, amb el temps me n’adono que vull anar-me preparant per tal d’assumir, d’acceptar les emocions ja que malgrat a vegades sigui dolorós, no acceptar-les ho acaba sent més.
Moltes gràcies Hermínia per compartir tant de coneixement, una abraçada!
Núria Gómez Tovar
Referente al fragmento del libro de Carl Rogers, que se menciona en el articulo, me gustaría hacer una reflexión, como dijo V.Frankl en “El hombre en busca de sentido” el hombre es el que invento las cámaras de gas pero también el que entro en ellas….es decir el ser humano, al ser racional puede ser el animal mas cruel del mundo.
Otra reflexión referente a las etiquetas es la siguiente, seguramente todos recordaremos a esa persona mítica que teníamos en clase, denominado “el tonto de clase”, seguramente en la mayoría de casos esa persona era bastante inteligente, pero como tenia esa etiqueta, tanto por su parte como por el resto de la clase, sistemáticamente asumía ese rol. Probablemente si alguien le hubiera ayudado en sus limitaciones y no hubiera permitido que le colgaran esa etiqueta, esa persona no hubiera adoptado esa conducta.
Por eso es tan importante que tomemos conciencia de quien somos realmente y así quitarnos las mascaras y etiquetas que nos cuelgan nuestros prejuicios o los prejuicios de los demás.
Marta Castany
Les mascares son molt fàcils de posar i molt dificils de treure només pel simple fet de que hi estem tan habituats que no som conscients ni de que les hem creat nosaltres mateixos com a defensa d’aquesta fantàstica societat que a vegades no ens deixa ni respirar.
Treballo i demano cada dia redescobrir-me a mi, però sobretot descobrir les mascares de la gent que m’envolta per ser capaç de separar i rediraccionar els meus judicis, és a dir, poder veure la llum que tots tenim a dins darrera de totes aquestes mascares.
Gràcies de veritat Hermínia per existir i compartir les lleis bàsiques de l’existencia amb tots nosaltres!!!
Una abraçada!!
Anamaría
Me ha venido un recuerdo … un dia en el máster que tú dijiste : hemos de dejar de hablar y empezar a escucharnos desde otro nivel, el entender al otro nos requiere CONSIDERACION pero el conseguir que otro nos entienda es un acto de VALOR. La clase acabó y todavia hoy recuerdo lo util que me fue y me es y me ayuda a conectar con mi propisito e identificar la mascara que me impide escucharlo…
una vez hecho este trabajo ya llegas a ser un miembro original de la especie humana.
un fuerte abrazo y gracias por tu aportación
neus salvatella
Gracias Herminia por compartir la claridad de tus ideas y aportar luz a mis pensamientos.
Desde muy pequeña he sentido el peso del guión que habían escrito mis padres para mi, el peso de la responsabilidad de un rol no elegido pero que he ido inconscientemente reforzando día a día, por comodidad, por ignorancia, para ser aceptada y querida por la sociedad. Esta máscara que he llevado durante años se esta resquebrajando y el miedo a que los demás me conozcan tal como soy se desvanece, siento que solo podemos acercarnos los unos a los otros desde la fragilidad, el miedo, la humildad..
Isari
Gracias Hermínia por compartir tu sabiduría con todos nosotros, este artículo arroja mucha luz a quien esté en esa lucha de encontrar su camino.
Yo hablaré por mi propia experiencia personal, lo que a mí me ha servido para saber cuál era mi propósito de vida. Desde que era niña tenía muy claro que quería un mundo más justo, con los años esto se ha ido concretando y definiendo en un propósito de vida. A medida que uno va creciendo, va imponiendo su lógica y se va olvidando de sus sueños de la niñez, pensando que son sólo cosas de niños. Yo nunca los olvidé, los mantuve y los mantengo vivos en mi corazón, a pesar de que dejé de escucharlos durante un periodo de tiempo. En ese periodo, fue justamente en el que intenté integrarme en la sociedad, ser una persona «normal», ahí empecé a representar un papel que no era el mío, dejé de ser YO. Con ello llegó el sufrimiento, de aparentar algo que no era, di el poder a los demás para que influyeran sobre mí, en definitiva dejé de escuchar mi voz para que me aceptaran y sentirme integrada. Supongo que los patrones culturales y de mi entorno acabaron imponiéndose. Tras siete años de andar perdida, decidí tomar de nuevo las riendas de mi vida, me valí del autoconocimiento para sacarme la máscara que llevaba y enfrentarme a todos los miedos que tenía. Empecé a ver las cosas con más claridad, oí de nuevo esa vocecita interior y me prometí a mí misma no dejarla de escuchar nunca más.
Mi propósito de vida, que se inició en mis sueños de infancia, ha ido tomando forma día tras día. Para ello, me he dado cuenta que es necesario seguir mi voz interior, dejarme llevar por la intuición y no por mi mente o mis emociones. Fluir y estar en el presente, viendo si lo que pienso, siento y hago me ayuda en la consecución de mi sueño. Eso es lo que me ha funcionado a mí, y lo que me permite SER.
Mònica Parejo
Quin bell escrit. M’ha arribat. A més, avui estic emocionalment receptiva a tot el que em passa. Aquest matí m’he acostat a una companya que se sentia sola perquè no s’ha sentit recolçada per l’equip de direcció. No és fàcil ser valent, avançar i abraçar-te a aquelles persones que es mereixen el teu respecte i la teva confiança. No és fàcil deixar de silenciar els teus sentiments i idees. Però quan ho fas t’alliberes… T’otorgues l’estatueta de l’honor i del respecte cap a tu mateix, cap als teus valors. Deixeu que el camí prengui el perfum de les vostres passes… Descobriu-vos! Van ser les paraules que em va regalar un poeta pidolaire ara ja fa molt de temps. Encara les recordo… Gràcies Hermínia per fer-me connectar amb el que realment importa.
ANA ALONSO
Me parece un artículo muy enriquecedor, sincero, profundo y auténtico. Estoy muy de acuerdo con esta línea de pensamiento, en particular sobre la idea básica de SER QUIEN SOY en lugar de entrar en esa lucha o competitividad conmigo mismo para ser otra cosa distinta, ya que esto es lo que mantiene mis etiquetas y máscaras. Vivir desde el SER pienso que es la auténtica libertad.
Ana García
Leyendo este artículo me ha venido a la mente una herramcienta psicoterapéutica que se utiliza desde la orientación sistémica y de terapia breve: la prescripción del no cambio. Esta se utiliza con clientes con elevada resistencia al cambio y consiste en darle una connotación positiva al echo de que esté en ese nivel del proceso aún y pedirle que no cambie, puesto que no sería positivo, no está preparado… En definitiva, cuando el psicoterapeuta le desaconseja que cambie le está «obligando» a que se mantenga en su postura y fuerza que se permita estar y sentir aquello que es fuente de problemas. Es en este punto, tras la aceptación de la situación, donde se inicia el cambio.
Es importante saber el rol que desarrollamos en los diferentes grupos o colectivos en los que nos movemos y el lugar que ocupamos, pero más importante es aún saber el lugar que ocupo en mi mismo, puesto que no puedo vivir sin mi.
De todas formas, hablamos del coachee, del cliente, del paciente, … pero si nosotros queremos ayudar a alguien a encontrar su lugar y aceptar quien es, lo tendremos que hacer desde nosotros mismos, sabiendo primero quienes somos y que propósitos tenemos. Hay una regla de oro en socorrismo que dice que antes de socorrer a alguien tenemos que estar a salvo. Un herido suele ser menos eficaz atendiendo a otro, pues sus facultades se ven mermadas.
Toni Muñoz
Ciertamente conocerse a sí mismo es fundamental para comportarse como realmente somos. A parte de máscaras y estereotipos de comportamiento, creo que hay algo más que nos empuja a ser quienes no somos: la ignorancia y el miedo. Podemos ser conscientes de que estamos fingiendo, de que nuestra vida es una farsa y de que la gente que nos ama nos empuja sin querer hacia ese ‘yo’ que no es el nuestro, pero si no sabemos como llegar a nosotros mismos ¿cómo podemos empezar a avanzar por el camino del autoconocimiento?. Aún cuando sepamos a dónde tenemos que dirigirnos, queda todavía algo por superar, el miedo a lo que encontraremos. Recuerdo que cuando era muy pequeño me daban mucho más miedo las puertas cerradas por no saber que se escondía detrás, que las que estaban abiertas, por muy negra que estuviese la habitación. Ese desconocimiento de lo que hay detrás, lo magnifica, lo hace muy grande, y sin datos objetivos en los que sustentarse, muchas veces el individuo prefiere no arriesgarse a comenzar el viaje. Por alguna razón se dice que más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer. ¿Cómo ayudamos a esas personas que sabemos que están sufriendo pero no se atreven a dar el primer paso?¿Cómo hacerles ver que lo que hay al final del camino merece la pena y nunca es tan malo?
josep gendra
De nou l’Hermínia és capaç de sorprendre’ns i, en aquesta ocasió, d’arribar al «moll de l’òs». La reflexió que vull aportar al Blog és en termes temporals i de reivindicació. Vull dir que si els Coach’s som capaços, entre d’altres coses, de fer feliços a les persones que acudeixen a nosaltres, acompanyant-los pel camí del seu autoconeixement, autoestima i autoafirmació personal, ¿com ho podem fer per què fi arribin abans i no després? En aquest cas de l’afirmació del Jo i del descobriment del veritable ésser de cadascú, el factor temps crec que hi juga un paper fonamental i em refereixo a l’etapa de l’adolescència. I ara la part de reivindicació: ¿Quan podrem tenir Coach’s als Instituts d’E.S.O. per ajudar als adolescents a entrar en l’etapa adulta amb garanties d’auto-coneixement per abordar la maduresa amb el seu veritable Ésser, despullats de màscares, estereotips i creences limitadores?. Serà positiu per a la societat amb nous Polítics, Mestres, Metges, Directius, Entrenadors, Científics, etc. més ben preparats per Liderar i Estimar als altres i servir-los millor.
Per una Societat millor pel demà, Coach’s als Instituts, avui!
Laia Arias
Abans que res: aquest article dóna molt de si! El trobo molt interessant perquè genera moltes reflexions. Personalment estic molt d’acord amb el que s’exposa.
Preguntar-nos «Quin sentit té la meva vida?», «Quin és el meu objectiu vital?» o «Quin és el meu propòsit a la vida?» va absolutament lligat amb el fet de definir-nos, saber qui realment som. Per tant, caldrà fer un «stop» a la vida: parar. Retrocedir, si cal, per desfer un trosset del camí. Reprendre’l per una altra via i explorar el nou entorn. Potser ens hem adonat que havíem volgut córrer massa i abans de començar no havíem ni mirat el mapa. Potser la brúixola no l’havíem col·locat en la direcció que tocava però ara ja assenyala més cap al nord i per tant podem seguir endavant.
Pel que fa al tema de «donar-li un propòsit a les nostres vides», el connecto amb el procés de canvi que pot fer cadascú. Crec que aquest procés ha de venir donat per elements com la implicació i motivació personals. Si et sents satisfet amb els canvis que estàs introduint a la teva vida, si et sents satisfet amb tu mateix, serà perquè ets conscient que estàs essent allò que ets o vols ser realment. Això implicarà, alhora, treure’t aquelles màscares que no t’acaben d’encaixar ni afavorir.
Finalment, dir que trobo molt encertada l’exemplificació del tema amb el fet de ser insegur o no.
Gràcies per l’article, que fa bellugar neurones!
Andrea kiskeri
M’ha agradat molt, sobretot el fet d’acceptar-nos tal com som sense deixar-nos influenciar per les opinions i el punt de vista dels altres.
Crec que les persones hauriem de començar a acceptar-nos enlloc de jutjar-nos tant.
Gràcies per l’artícle!
Beatriu Balsera
Genial ¡¡ Estoy de acuerdo con Alex y su afirmación de YO SOY, aceptación y compresión hacia nosotros, que algunas veces no tenemos. No nos comprendemos, con lo cúal no nos aceptamos. Posiblemente nos pongamos las etiquetas nosotros mismos para defendernos de algo, en el momento en que aceptas lo que sientes, te relajas, te desprendes, y puedes ser tu mismo. Hay momentos, a veces en que parece que no podamos ser nosotros mismos, pero cuando nos decimos «si ya lo sabia yo, o nos prejuzgamos de antemano, es porque también nos conocemos más de lo que creemos. La influencia de hechos y/o de personas, no pueden impedir que seamos quienes somos. La experiencia de sentir y hacer, plenamente consciente de quien somos, te conecta contigo y por tanto la autoestima se ve tan reforzada, que entonces es cuando crees y sabes que podrás conseguir tus propósitos.
Muchas gracias Hermínia, saber quienes somos es el reto más importante de nuestras vidas y el que nos permitirá desarrollarnos y evolucionar.
Alex Fiol
Un artículo fantástico. Me parece especialmente relevante el hecho de que, tal como está planteado, a mi me evoca la idea de que «ser quien soy» no significa ser esto o aquello. Es decir, no se trata de sustituir una etiqueta «negativa» por otra más «positiva» sino de limitarse a vivir desde la experiencia real de la propia existencia sin tratar de negarme a mi mismo para cubrir determinadas expectativas propias o ajenas. El sentido real de mi vida es vivirla de un modo totalmente consciente y permitirme ser. En definitiva YO SOY y el simple hecho de estar vivo y existir ya es en si mismo un propósito en la medida en que me acepto y me abro de forma sincera a mi mismo y a los demás
Miquel Torres
Gràcies Herminia, un cop més per compartir amb nosaltres la teva sabiduria. Realment, si de petits ens deixesein èsser nosaltres mateixos ens estalviarien molts problemas d’adults i seriem, crec, molt més feliços.Sort que alguns hem decidit tornar a ser-ho i poser-nos en mans de coachs com tú.
Una abraçada
Miquel