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El valor de la solidaridad
El valor de la solidaridad
Por Lluís Sanmiquel
www.escolaconciencia.com Psicòleg Coach (col·legiat 20113)
Alumno de la 6ª Promoción del Master en Liderazgo Personal y Coaching Teleológico – Institut Gomà ¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué estoy haciendo aquí?
Estas son las tres preguntas que se hacen cada día delante del espejo los alumnos de la escuela Sathyalayam School (Pondicherry, India). A esta escuela, creada por el Doctor Claudio Satorre, fundador de la ONG JAL www.jal-ong.org hace más de cuarenta años, acuden diariamente un centenar de niñas y niños estigmatizados y marginados por la lepra o alguna discapacidad, o mejor dicho por la pobreza y la incomprensión. En esta región de la India, la mayoría de niños con discapacidad psíquica son aniquilados o abandonados atados en algún lugar escondido.
Nos lo cuentan Montserrat Pérez y Neus Salvatella en la conferencia “El valor de la solidaridad” del II Congreso Nacional de Coaching y Liderazgo. Estas dos doctoras catalanas, en la actualidad presidenta y vicepresidenta respectivamente de JAL, nos hablan también del Cert India Hospital de Pondicherry. Por él, abandonaron la actividad profesional en nuestro país para liderar e inspirar con su ejemplo y generosidad a un pequeño grupo de voluntarios que, como ellas, dedican su vida a poner en practica el valor de la solidaridad.
Y este es el uno de los ejes vertebradores de su ponencia. Sus ojos brillan cuando narran su actividad en la India mientras de fondo se suceden las imágenes: indumentarias de colores, miembros amputados, caricias de consuelo y miradas de gratitud. A continuación, con la serenidad que da vivir en congruencia con ellos, describen la esencia misma de los valores: aquello que realmente nos importa, que nos orienta como una brújula, que nos impele a la acción… aquello que da sentido y de lo que somos responsables. Sus ojos brillan de nuevo cuando el valor citado es la solidaridad.
Primero desgranan la solidaridad. Uno: compasión, padecer con, empatizar, ver a los demás con los ojos del corazón. Dos: reconocimiento, reconocer –conocer de nuevo– la dignidad del ser humano. Tres: universalidad, abrirnos al mundo.
Por fortuna, la lepra es una enfermedad dificilmente contagiable en la actualidad. La solidaridad, como el resto de los valores, es altamente contagiosa. Los valores no se enseñan, se contagian! Y esto es lo que Neus y Montserrat hicieron: nos contagiaron. Qué paradoja! Dos doctoras que contagian… y que piden que no nos curemos.
Una fotografía capta una modesta placa en el Cert India Hospital: “Nadie tiene el derecho de ser feliz solo. El tesoro que te dejo es aquello bueno que no hice y que deseaba hacer, y que tu deberías hacer tras mi muerte.”
Y para acabar, como muestra de gratitud a Montserrat y a Neus, que además de médico es Coach certificada por la Universidad de Barcelona, te propongo que respondas las tres preguntas, delante del espejo:
¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué estoy haciendo aquí?Si eres Coach Teleológico y lo prefieres, puedes substituir el “¿Por qué?” por un “¿Para qué?”
Lluís Sanmiquelwww.escolaconciencia.com Psicòleg Coach (col·legiat 20113)
Alumno de la 6ª Promoción del Master en Liderazgo Personal y Coaching Teleológico – Institut Gomà
8 Comments
Bianca van der Veen
Este caso de Montserrat y Neus, dos personas que lo dejan todo en su país y se embarcan a ayudar a otros es muy inspirador. La preginta que me hago es, yo lo haria? Y mi respuesta es NO, un no rotundo. Esto me hace pensar en si yo puedo hacer cosas por los demas y aqui la respuesta es un SI tambien rotundo. Yo no necesito irme a otro pais para ayudar y eso esta bien para mi. Esto es lo que importa, puedes ser solidario aqui y ahora y esta es mi apuesta
Josep muntan goma
Lo bueno de ser feliz es poder compartirlo. Este artículo y la labor de Montserrat y Neus me recuerdan que dar y entregarse a los otros es una bonita manera de nutrirse, y ser más felices. La felicidad genuina puede ser contagiosa. Que valiente y fuerte es la gente que vive dando servicio a los más necesitados. Grandes preguntas las de la escuela. Conocidas por muchos, abordadas por pocos. Gracias!
Ares
Felicitats Lluis…un gran article!
Sara lopez
Hola Lluis,
Me gustaria transmitirte todo mi respeto a tu post y a ti es precioso, mientras lo leia mi mente estaba en la India. Con las DRAS. y me has echo reflexionar lo grande que es dar y sobre todo cuando es a gente que lo necesita tanto. Hay muchos valores en dar.Amor,cariño,esperanza,confianza,respeto.y sobre todo cuando das todo eso y mas tu cajita interior esta llena de todo lo que tu entregas a cambio de una sonrisa,un abrazo,y todo junto nos hace ser mas Humanos.
un saludo. Tanto que aprender…..
Gemma
Em sap molt de greu no haber pogut acudir aquest taller m’hagués encantat , ja que com a col.laboradora de la Fundacion Vicente Ferrer, se que es tot això i com s’intenta treballar per ajudar els mes desfavorits en aquestes comunitats de la India.
Si algú volgués informació al respecte o alguna mena d’ajuda no dubteu amb contactar amb mi, estic a la vostra disposició!
Agraïr la feina que vosaltres també esteu fent i la solidaritat ompla molt a una persona!
Per cert Pondicherry es una ciutat preciosa us recomano visitar-la!
Conxi Sola
Quan llegia el teu post, Lluis, pensava: potser és tracta d’això, respon les 3 preguntes, però respon des del cor, des del treball intern, des de l’autoconeixement, i així obrim les nostres portes a la solidaritat, a l’acció solidària.
Com diu Marisa, les empreses també poden respondre, qui sóc? per a què estic aquí? què estic fent aquí? L’empresa i les seves persones són potencialment solidaris, així doncs, tenim un camí interessant a recòrrer en aquest sentit.
teresa terrades
Em ve una paraula al cap , que és també un valor: la gratitud, aquella que vivim quan les nostres accions es mouen en el paradigma de la solidaritat. Aquesta que et trasllado per haver pogut gaudir d’aquest magnífic post.
Marisa
Querido Lluís,
realmente fue muy emotivo este taller. Se habló mucho de valores durante todo el Congreso y, seguro, es la mejor vía para desarrollarnos como personas y como empresas. Aunque he echado de menos el valor de la solidaridad en las empresas:
– Cómo crecerían las ventas si se destinasen beneficios en acciones solidarias?
– Cómo se mejoraría la eficacia de los empleados si su capital humano trabajase para logros solidarios y no solo económicos
– Cómo cambiarían la imagen de las empresas si se fomentase el valor solidario de las mismas?
Trabajar para el bien común, como cambio de paradigma.
En el taller, se barajaron estos datos que me llamaron mucho la atención: El voluntariado en la Unión Europea esta en el 24% y en España, baja al 15%.
Me pregunto, si estos datos tienen que ver con la crisis que nos envuelve y con esta cultura individualista que nos alimenta cada día.
Lluís, Gracias por este artículo; tu gran valor solidario, te define y te responde: «para qué estas aquí» y lo que estás haciendo.