COACHING, COACHING TELEOLÓGICO, General
Cierre de un proceso de Coaching Teleológico
dsfaj
¿Qué hace sobresaliente a un ser humano?
Propósito, inteligencia, determinación y pasión.
Jorge González Moore
Cerrar un proceso es tan importante como el propio proceso de coaching teleológico. Cerrar adecuadamente garantiza que NO SEA UN FINAL EN FALSO, esto significa que no queden abiertos aspectos emocionales, cognitivos, corporales o espirituales; aspectos sin explorar, que posteriormente puedan generar bloqueos . Es decir, que se hayan consolidado los aprendizajes y se hayan integrado los cambios de paradigma.
Toda interacción tiene un final. ¿Cómo podemos saber que es un buen momento para cerrar el proceso de coaching teleológico? Es una pregunta clásica de los alumnos en prácticas del Máster en Liderazgo Personal y Coaching. Éstas podrían ser algunas de las respuestas:
- Cuando el cliente ya ha realizado el cambio de paradigma y está avanzando, por sí mismo, hacia el objetivo que se había propuesto. Podemos preguntarle directamente si cree que ya puede seguir por sí mismo. En caso afirmativo procedemos al cierre del proceso.
- Cuando el cliente ha tomado conciencia de que ya no ve ningún obstáculo ante él y que si lo ve, se siente capaz de superarlo. Se hace responsable de sus decisiones, lleno de energía y coraje. No percibe ningún impedimento para liderar su propio proyecto de vida.
- Cuando apreciamos que el cliente ha cambiado su estado emocional, su postura es distinta, su mirada, su cara, incluso su manera de andar y expresarse corporalmente. Es como si se hubiera desprendido de una mochila que no era consciente de cargar a sus espaldas antes de iniciar el proceso. No mira hacia atrás, ni mira hacia abajo. Mira hacia adelante.
- Cuando el cliente se muestra comprometido a pasar a la acción y pone en marcha las medidas que le permitirán encarar los retos que se le presentan. El cliente tiene la visión clara: del lugar al que se dirige y de quien quiere ser. Identifica las acciones a realizar.
- Cuando el cliente reconoce y sabe qué ha producido el cambio y asume que puede hacerse responsable de utilizar las estrategias y recursos que ha aprendido a lo largo del proceso con su coach.
En definitiva, cuando puede liderar su vida. Cuándo es autónomo emocionalmente y asume la responsabilidad de su vida.
Yo soy el dueño de mi destino;
yo soy el capitán de mi alma.
William Ernest Henley
Lo más adecuado es anunciar que vamos a realizar la sesión de cierre en nuestro próximo encuentro con el cliente. Pero, hay ocasiones en que cuando viene el cliente y empezamos a conversar apreciamos que el proceso ha finalizado, no tiene ningún sentido prolongarlo y aprovechamos entonces para realizar el cierre. Hemos de estar siempre preparados para que se dé este momento.
Puesto que el proceso de coaching teleológico es una conversación transformadora que se inicia con un vínculo de confianza y unos acuerdos definidos entre el coach y el cliente, el cierre representa la culminación del proceso. Al finalizar el proceso es fundamental conectar con el propósito que dio origen al encuentro, identificando los cambios entre lo propuesto y lo efectivamente logrado.
Todos tus sueños pueden hacerse realidad
si tienes el coraje de perseguirlos.
Walt Disney
Para abordar el cierre del proceso de coaching teleológico hay que cubrir varios aspectos:
Celebrar los éxitos del cliente
- Lo podemos hacer dándole un feedback evaluativo desde el inicio del proceso hasta el momento presente y proyectando el futuro que ha diseñado el cliente: allí dónde “ya se ve”.
- También puede ser a través de preguntas al cliente sobre los beneficios que los cambios realizados le están aportando a su vida personal y profesional.
- Puede ser a través de un pequeño “presente” simbólico, metáfora de lo trabajado y logrado a lo largo del proceso, por ejemplo un pequeño diploma en el que esté escrito su nombre y el objetivo logrado.
Revisar lo que el cliente ha aprendido y cómo lo podrá utilizar en el futuro.
- Es interesante propiciar durante el cierre una aproximación sensible a la propia experiencia como cliente durante el proceso: la autovaloración y valoración del proceso y de su resultado desde el sentido y significado para la vida, lo que le ha impactado, lo que le ha despertado. Lo que realmente conecta al cliente con el significado afectivo de lo vivido y sentido.
- Podemos dedicar un espacio a destacar todo lo más relevante de cara al desarrollo y el aprendizaje.
- Una de las herramientas que se pueden haber utilizado al inicio del proceso es la “rueda de la vida”, podemos volver a utilizar este recurso para confirmar los cambio realizados de una manera visual.
- También puede ser a través de preguntas al cliente sobre qué recursos le han servido para confiar y decir avanzar, de qué ha tomado conciencia, qué ha aprendido que le puede ayudar en el futuro.
- Si ya está habituado a realizar una síntesis por escrito al final de cada sesión, en esta sesión final le podemos invitar a escribir una síntesis del final de proceso (que haga una fotografía y la tenga a mano siempre que lo necesite).
- También podemos utilizar un pequeño formulario para constatar el cierre del proceso.
Diseñar la continuidad del camino que ha iniciado con el proceso de coaching teleológico
- Remarcar el cambio de paradigma que le permite el logro de su objetivo especialmente cuando el cliente está realizando un cambio de hábitos.
- También determinaremos una cita de seguimiento posterior, pasados unos meses, por si se tuviera que revisar alguna desviación producida en ese tiempo, sin el acompañamiento del coach.
Asegurarnos que el cliente es autónomo para seguir adelante sin el acompañamiento del coach
- Para ello prepararemos con el cliente una serie de preguntas que se pueda realizar a sí mismo para garantizar que sigue en este proceso de cambio que ha iniciado con el coach. Puede preguntarse ¿lo qué voy a hacer a continuación me acerca o aleja de la persona que quiero ser?
- Otra alternativa es programar una pequeña reflexión diaria para revisarse a sí mismo. Por ejemplo preguntarse: ¿de qué decisión que he tomado hoy me siento satisfecho ? ¿desde dónde he tomado hoy mis decisiones? ¿Qué competencias quiero seguir potenciando?
Recordar al cliente que el proceso es de final abierto
- Mostrarnos abiertos y disponibles en caso de que nos pueda necesitar en el futuro.
- Preguntar si quiere que, en algún momento previo a la sesión de seguimiento, realicemos alguna breve llamada para felicitarle por sus avances o si no está avanzando cómo se esperaba, volver a concertar una sesión para reenfocar el proceso.
Agradecer al cliente el proceso realizado
- Mostrar agradecimiento por su contribución a nuestro ejercicio profesional como coachs y nuestra mejora personal.
- Agradecer la confianza y el privilegio de haberle acompañado en su proceso de cambio.
No le pongas excusas a lo que no puedes terminar.
Enfócate en todas aquellas razones
por las que debes hacer que suceda.
Ralph Marston
Un cierre efectivo garantiza que los procesos que se iniciaron sean adecuadamente finalizados. Para ello, es fundamental, que las ganancias y los logros alcanzados sean explicitados por el cliente y por el coach. Trabajar esta competencia es un reto permanente del profesional del coaching teleológico.
También es interesante, crear un espacio en el que el cliente pueda facilitar un feedback al coach, sobre su desempeño, su actitud, su predisposición, su estilo y sobre el proceso, la duración, el número de sesiones, el lugar, el seguimiento entre sesiones…. En este sentido, como coachs escucharemos con mucha atención y estaremos abiertos a recibir lo que el cliente nos diga para:
- Identificar lo que estamos haciendo bien y lo que requiere mejora.
- Sistematizar la experiencia vivida.
- Valorar los resultados del proceso de coaching.
- Prepararnos conscientemente para emprender acciones de mejora como coach.
Ésta es una competencia clave en para el buen ejercicio del rol de coach teleológico.
Podemos identificar varios indicadores a tener en cuenta para su desarrollo competencial:
- Ser capaz de gestionar feedbacks constructivos de doble vía (entre el coach y el cliente)
- Saber propiciar reflexiones sobre los aprendizajes, los logros obtenidos y los impactos creados durante el proceso.
- Resaltar que los resultados logrados han sido producto del compromiso y competencias del cliente
- Estimular la construcción y seguimiento de compromisos por parte del cliente.
- Facilitar la creación de una memoria del proceso, por ejemplo, a través de los mappings entregados a lo largo del proceso.
- Utilizar las reflexiones y feedbacks recibidos para los aprendizajes y el crecimiento personal y profesional del propio coach.
Saber cerrar un proceso, como todo en la vida, se aprende cerrando procesos.
Hermínia Gomà Quintillà
4 abril 2015
Barcelona
53 Comments
Carles Peiró
«Toda interacción tiene un final». Mas allá del cierre de un proceso de Coaching Teleológico, es toda una lección de vida en nuestras relaciones personales. ¿Quién no se ha quedado enganchado física o emocionalmente en alguna relación por no saber cerrarla a tiempo? Como dice Joaquín Sabina en una de sus lecciones de vida hechas canción: Al lugar donde has sido feliz, no debieras tratar de volver. Gracias Hermínia por cambiar la bombilla fundida de mi faro…
Esther Gallego
Un articulo muy interesante!! creo que una manera de hacer un buen cierre de proceso es con un ultimo feeback visual en el que el cliente pueda ver toda su evolución y su progreso hasta llegar al objetivo deseado.
Armando Sosa
Entiendo que proceso es el conjunto de pasos que el coachee habrá dado acompañado por mí como coach. Ese conjunto de pasos se da con el propósito de lograr un objetivo importante para la vida del cliente. Y entiendo que ambos, ni el coachee ni yo seremos los mismos, cuando ese proceso llegue a su fin. Todo fin, todo cierre de ciclo de desarrollo personal merece un reconocimiento. Soy apasionado de los símbolos y definitivamente me inspira y entusiasma mucho la idea de encontrar junto con mis futuros coachees, simbolos que expresen la esencia del cambio y el crecimiento que con mucho amor y poder yo habré acompañado en ese periodo de sus vidas. Muchas gracias Herminia
Anna Vicén Renner
Me impacta leer este artículo. Me proyecto como futura coach en una sesión de cierre, despidiéndome de ese cliente, que ya está preparado para volar solo. ¡Me emociono! ¡Que increíble sensación será la de haberle acompañado hasta allí. Con mucho trabajo, herramientas, momentos más duros, otros placenteros, muchos silencios, muchas preguntas y miradas. Para el cliente, por fin, habrá llegado su dulce momento.
Como eterna aprendiz y como alumna de Coaching Teleológico que soy actualmente, sin duda este será un post que leeré y releeré hasta que salga solo. ¡Mil gracias Hermínia!
Pep M.
Em sembla molt encertat l’article centrat en el tancament del procés.
Tot comença i acaba i penso que és molt important apendre a tancar etapes. Hi ha en el tancament, penso, un munt de conceptes molt importants en la vida com són
– La importància de la reflexió per saber sobre l’efectivitat O no d’un procés.
– La importància d’acceptar crítiques constructives i de ser capaços de destacar progrés. La vida és més fàcil si la vivim humilment i amb ganes de seguir avançant aprenent.
– La importància de deixar anar i confiar en el client (en els altres, en nosaltres, en la vida..)
Aquestes pautes reforcen, per a mi, la idea que el CT és una metodologia molt treballada, clara i en constat evolució
Gràcies per la contribució a totxs que ho feu possible!
Pràctica pràctica pràctica!
NICOLAU JUAN PUJOL
El cierre en un proceso de coaching es el momento perfecto para analizar el proceso, tanto por parte del coach, como del coachee. Del mismo modo que nos damos cuenta de los cambios que experimenta nuestro cliente durante el proceso, al cierre del proceso, no debemos tener miedo de preguntarle a nuestro coachee, que opina del proceso realizado y de nuestra labor como coach. Tomar los comentarios de forma constructiva, nos ayudará amejorar como coach y como persona.
patricia.delgado.p
El cierre se mejora con la práctica. Me llevo esto del artículo: practicar, sistematizar, mejorar… Hay mucho más, pero ahora siento que necesito poner en práctica lo aprendido…
Günter Cepek
El cierre de un proceso es un evento importante: Significa pararse un momento para mirar atrás, tomar consciencia del camino recorrido, celebrar los logros y soltar con agradecimiento lo que podría dificultar el siguiente paso. Es la despedida, el final de un trayecto y el inicio de otro; es la integración de lo vivido y el cortar del cordón umbilical. A este proceso, le acompaña la tristeza – por la pérdida de lo conocido, lo apreciado, lo querido; el miedo – por la incertidumbre de lo que traerá el futuro y, al mismo tiempo, la alegría y el entusiasmo – por lo que queda por descubrir. Un buen cierre es todo aquello: un mirar atrás con gratitud y desde una nueva consciencia. Es la mirada que da sentido a todo lo vivido y que se resume en estas dos palabras: ¡Sí! ¡Gracias!
Adrià Casanovas Villanova
Me parece importante este artículo ya que refleja el fin de una etapa de aprendizaje y empezar a andar solo.
Andrea Corominas
Un gran article sobre tancament de processos. La vida està feta d’etapes que has d’anar tancant mentre altres es van obrint. Poder acompanyar a una persona en algun d’aquests processos i poder-lo tancar de manera bilateral és un privilegi i un orgull com a professional i com a persona. Si a més a més continues sent un referent per aquesta persona quan torna a tenir un moment baix és doblement satisfactori. El desaferrament de terapeuta-client és bàsic i molt important per evitar addiccions.
Gràcies de l’article aclaridor i brillant.
Josep Arévalo
Me gustaría felicitar a la autora del artículo por la claridad y concreción del mismo, ha sido una lectura muy amena.
Como estudiante de coaching, encuentro muy interesante el artículo, pues se dan unas guías muy concretas de algo que considero muy importante como es el cierre, una parte que de hacerla de manera efectiva, entiendo que empodera aún más al cliente en el momento de «caminar solo».
Asimismo, algunos de los aspectos que he leído en el artículo, como la APROXIMACIÓN SENSIBLE A LA PROPIA EXPERIENCIA DEL CLIENTE, me parece una excelente forma de darle forma al cierre, de dejar constancia y generar aún más conciencia sobre lo que se ha trabajado durante el proceso. También me gusta que se den consejos sobre herramientas concretoas a utilizar durante el cierre, como reutilizar la Rueda de la vida para ver lo que se ha avanzado o plasmar el éxito del proceso a través de un diploma o utilizar una foto que resuma lo que el cliente ha vivido. En definitiva, me siento agradecido por este artículo.
Irene Palacios
Cuando hablábamos en clase del cierre de proceso, reconozco que me parecía sumamente delicado el saber detectar cuando era el momento del cierre. Ahora con la distancia, y porque probablemente lo he madurado, veo más claro que habrá dos agentes determinantes entre los 5 que destaca el artículo: que asuma que puede hacerse responsable y que haya perdido el miedo a volar estando comprometido a pasar a la acción para ser quien quiere ser. A mí personalmente me parecen los dos puntos más medibles.
A continuación, revisar lo que es cliente ha aprendido y que haga su propia evaluación y recorrido puede ser muy especial haciendo uso de herramientas tan bellas como la rueda de la vida, un mapping, un regalo simbólico de su proceso… Pueden poner ese lazo rojo al cierre del proceso y contribuir a una felicitación que no solo son con palabras, sino algo más físico que se lleva consigo mismo.
Me parece muy profesional el hacer saber al Coahee que el proceso tiene un final abierto y es libre y dueño de volver a nosotros cuando vea necesario. Dejando constancia de nuestra llamada de seguimiento para saber de él/ella.
Y por último no perder la valiosa oportunidad de recoger Fb de nuestro Coachee y tomar nota introducir mejoras.
Gracias por este buen artículo Herminia, que recoge muy bien los puntos a tener en cuenta para un cierre.
Sergi Montells
Leímos este artículo en el último seminario del 1er año de Máster de Coaching Teleológico, pienso que es un gran artículo, muy completo, para asegurarnos que cerramos un proceso de Coaching con éxito.
Tenemos que realizar diferentes acciones que nos ayudarán a cerrar, fortalecer y remarcar los cambios que el cliente ha conseguido durante todo el proceso, el camino que hemos andado juntos. En primer lugar, celebrar los éxitos del cliente, recordándolos, haciendo un feedback evolutivo o un feedback de felicitación, siguiendo por revisar lo que ha aprendido el cliente, y cómo esto le servirá en el futuro, diseñando la continuidad del camino. Adoro la idea de pensar en que hemos de asegurarnos, antes de dejar al cliente solo, que éste podrá seguir sin nosotros y que es realmente autónomo para cumplir el objetivo del proceso, recordar al cliente que es un final abierto y que si nos necesita puede acudir a nosotros, y agradecer al cliente el haberle podido acompañar en esta etapa de su vida.
Personalmente creo que cada final será diferente con cada cliente, habrá clientes con los que además podremos usar nuestra creatividad para el cierre, con un mapping, con algo simbólico del proceso, con un regalo, con un detalle, con una carta, con un muñeco… Son miles las formas de dar un feedback, de potenciar el objetivo del cliente, de ayudarle a recordar siempre que ha conseguido finalizar el proceso y es autónomo para conseguir ese objetivo.
María Boggiero
Se cierra un capítulo, pero el libro sigue abierto y escribiéndose. Acompañamos la lectura final de un episodio en donde el narrador ha pasado a ser protagonista, logrando alinear sentir, pensar y hacer.
Entiendo que en un cierre se dan varias etapas, por un lado propiciamos en nuestro coachee un acto de conciencia y atención hacia el propósito original y el cambio efectivamente logrado, elaborando la conexión y verificando los logros alcanzados, …celebrando los mismos! Así mismo le instamos a diseñar la continuidad del camino iniciado en el proceso de coaching, contemplando la nueva visión, constatando que la misma es la luz que iluminará el camino a transitar y para el cual nuestra puerta estará abierta y agradecida de haberle acompañado en su proceso de cambio. Por otro lado entiendo vital para nuestro crecimiento profesional pedir feedback respecto a nosotros, las apreciaciones de nuestro cliente desde su experiencia sobre nuestra praxis.
Recuerdo una experiencia al respecto del cierre, antes de iniciarme en el máster me inscribí en las sesiones de mentoring del Institut Gomà, y llegó el día (después de muchos de escucha y de varios como coachee) en que pude participar como coach, preparé con esmero el mapping para la coachee, pues era una sesión de seguimiento… el universo, que se las arregla para conspirar con nuestras intenciones, me puso frente a este artículo, de hecho lo imprimí, lo leí, demasiado nerviosa como para internalizarlo y cuando llegué a la sesión… era una sesión de cierre! Me encontré no queriendo cerrar y dándole vueltas tratando de encontrarle la 6ª pata al gato. Con total paciencia, Herminia, fuiste guiando mis pasos, que se enganchaban a todo menos a cerrar un proceso que a todas luces la coachee ya había decidido y sentido que era así (un cierre), hasta que dejé que pasara… Mi aprendizaje fue, más allá que el de hacer caso de las pistas que me da la vida, el no resistirme a la voluntad del cliente, el recordar que en una relación de adulto-adulto la decisión del otro es su propia sabiduría, su libertad absoluta. Aprendí lo valioso de confiar en el coachee y la tan importante tarea de vaciarme del ego. Gracias!
Joan Ferran
El cierre de un proceso de coaching es un momento para la reflexión, para tomar consciencia de todo el trabajo realizado, el ver la evolución, el aprendizaje, la transición desde donde estaba a donde estoy. Es un momento parecido al de un medallista olímpico en el momento de subir al pódium, en aquel momento le viene a la cabeza todo el esfuerzo realizado, su evolución, los sacrificios, las renuncias, y finalmente la satisfacción del objetivo cumplido. El coachee debe finalizar teniendo la seguridad de que ya puede volar solo, puede liderar su vida, pero recordando que el proceso es de final abierto, me parece muy acertado que el coach realice una llamada transcurridos unos meses para interesarse por la evolución del coachee. Finalmente, le doy mucho valor a la creación del espacio para que el coach reciba el feedback del coachee, hay que aprovecharlo para aprender, corregir lo que se puede mejorar y reforzar lo que se ha hecho bien. Gracias Herminia por este artículo tan detallado.
Diana Sánchez Casanova
Una frase famosa de “Matrix” nos decía: “Todo lo que tiene un principio tiene un final”. Y es cierto. Todo lo que empieza, tarde o temprano, termina. Pero no nos olvidemos: todo lo que acaba, da paso a algo nuevo. Todo lo que tiene un final tiene un nuevo principio.
Así es como yo veo el cierre de un proceso. Se termina no porque si, sino porque se ha abierto algo nuevo. Porque el cliente ha cambiado, ha dado paso a otra etapa de su vida. Ya no es necesario seguir.
Me gustaría destacar, sobre todo, el feedback que nuestro coachee puede proporcionarnos. Porque este ha sido su proceso, pero nosotros también nos hemos llevado algo, hemos aprendido de él. Este final no es solo suyo, es nuestro, y nos permite mejorar y conectar con nuestra esencia de coach.
¡Muchas gracias por acompañarnos en nuestro proceso, Herminia!
Aida
Si cerrar cada sesión es importante, cerrar el proceso en sí lo es más si cabe.
Siempre hemos de estar preparados para ello, lo que me resulta muy interesante, esa es la magia del coaching teleológico, que nunca sabes lo que sucederá en la próxima sesión y con qué nos sorprenderá el cliente.
Como puntos importantes, me quedo con conectar con el propósito inicial y revisar que realmente lo hemos alcanzado y asegurar que el cliente ha integrado realmente el cambio de paradigma.
Adicionalmente, celebrar los éxitos. Este momento me encanta, poder tener la oportunidad de regalar algo al cliente, como un símbolo, una frase, realizar un mandala, etc., como señal de agradecimiento y reconocimiento por sus logros.
A nivel de metodología, concertar una sesión de seguimiento pasados unos meses para finalizar por completo el proceso.
Y por último, la actitud del coach, que me parece una actitud ejemplar para seguir en la vida: solicitar feedback al cliente como eternos aprendices que somos, agradeciéndole lo que juntos hemos podido crecer y ser conscientes de que lo que hoy sirve quizá mañana pueda no ser así, hemos de estar abiertos a la mutabilidad de la vida y siempre disponibles para nuestros coachees!!
Pilar Peña
Tal y como se expone en el artículo, acabar un proceso de coaching es sin duda un gran momento para el cliente y para el coach. Se cierra el proceso, pero se deja la puerta abierta.
Si hemos de estar atentos durante el proceso de cuando plantear el cierre, creo que es importante ir pensando cómo vas a celebrar el cierre del proceso con ese cliente concreto.
Acaba el proceso transformador con el coach, pero el cliente continúa solo liderando su camino hacia sus objetivos. En ese viaje puede serle de ayuda tener herramientas como el mándala, un resumen de los mapping que le recuerden que ya está en marcha.
La sesión de cierre puede ser para el coach un buen momento de síntesis y de autoevaluación del ejercicio profesional. Seguramente, después de cada proceso y de cada cliente el coach también se habrá transformado y continuará su proceso de crecimiento personal.
Mónica
Hola, pienso que en la vida es bueno saber cerrar etapas para poder continuar y a través del artículo observo y aprendo que en un proceso de coaching también es bueno entre otras cosas para constatar que el coachee tiene las herramientas para tener confianza de como liderar su vida.
Gracias por la información transmitida.
ANNA GIRBAU MORENO
Cuando hablamos de un cierre de proceso, me imagino el proceso como una película donde el transcurso de la misma es tan importante como su final, un film con un buen final determinará la calidad de la película. Sin embargo, si la película ha sido buena pero termina inesperadamente, dejándote con un sabor agridulce, lo más probable es que no te llegue el mensaje de la película y no integres todos los aprendizajes que se podrían haber dado gracias a un buen final que te dejara con ganas de una segunda parte, con nuevas experiencias y escenas y con el mismo protagonista.
Es por ello que me parece fundamental crear un buen cierre de proceso en el momento adecuado, entrenándose a través de la práctica para realizar cierres de proceso de calidad que le sirvan al cliente tanto como el resto del proceso. Y se vaya del proceso habiendo realizado un cambio de paradigma y de haber avanzado en su propio camino de aprendizaje, sintiéndose capaz de superar cualquier obstáculo gracias al cambio de su estado emocional. Veremos a una nueva versión de nuestro cliente, comprometido con sus acciones y haciéndose responsable de su vida.
Como coachs nos deberemos seguir entrenando para ello, teniendo en cuenta los aspectos básicos a realizar en un cierre de proceso, que como nos enseña el artículo, son: celebrar sus éxitos, revisar sus aprendizajes, asegurarnos de su autonomía, recordar al cliente que el final del proceso es abierto, así como el final de una película, que debe seguir escribiendo su historia y dirigiendo su propia película y finalmente agradecerle la oportunidad que nos ha brindado para seguir aprendiendo como coachs.
Por tanto, realizar buenos cierres resultará importante para el éxito del proceso.
Del artículo me quedo con las palabras de Ralph Martson: “No le pongas excusas a lo que no puedes terminar. Enfócate en todas aquellas razones por las que debes hacer que suceda.”
Ana Sánchez Castillo
Nuevo capítulo para mi “mini guía de un aprendiz de coach”!
Me gusta el enfoque de que esta sesión es tan importante para el coach como para el cliente. El cliente va a diseñar su marco de actuación a partir de ahora, su camino, la respuesta a la pregunta: y después de mi proceso de coaching qué? Qué haré cuando me encuentre en una situación difícil? Que recursos usaré? Con qué me conectaré? Recordarse a sí mismo cuál es la persona que realmente quiere ser para, ante los desvíos, volver a encauzarse solo. Y para el coach como feed back de su estilo y su manera de hacer, qué necesito seguir aprendiendo o que necesito mejorar? Ser consciente además de lo que uno crece como persona al acompañar a otro!
Por otro lado el final abierto, como oportunidad! Nada está escrito, tu eres el dueño de tu destino, que quieres ser? Ve a por ello!!
Sara Berrocal Valenzuela
¿Quieres algo? Entonces ve. Este artículo es el colofón de todos los que me he leído en este curso. Y aunque pareciera que no me iba a aportar nada nuevo es el que más me ha hecho reflexionar. Porque al hablar de cierre, estamos hablando de logro por parte del cliente, de cambio real, de todo lo que se ha puesto en juego ha salido bien y se ha ganado. No siendo un proceso en falso sino un proceso real en el que tú como coach has acompañado hasta el punto exacto, ni más ni menos; has realizado preguntas lo suficientemente potentes como para despertar lo que hay dentro de tu cliente, sin juzgar, ni intuir… Habrás tenido, como coach, que modificar muchas partes de tu discurso y del proceso y habrás recibido feedbacks constructivos de tu cliente que te habrán hecho crecer profesionalmente. Tu cliente habrá crecido, aún más exponencialmente gracias a tu acompañamiento, lo que te llenará de amor por aquello en lo que inviertes.
Rosa Mari
Como futura coach quiero agradecerte la claridad del artículo que va a ser de gran utilidad y ayuda para el cierre de un proceso. Al final de la lectura he conectado con la humildad que debo tener, siempre presente, aceptando el feedback que me aporte el coachee para aprender y mejorar pues, cada proceso es una nueva lección.
Como coachee, si puedo compartir mi experiencia en el momento del cierre, literalmente me sentí “GAVIOTA”, había adquirido la fuerza necesaria para tomar las riendas de mi vida, podía volar, la altura y precisión del vuelo dependía exclusivamente de mí, era yo quien decidía, lideraba mi vida.
Quiero compartir dos citas, significativas para mí del libro JUAN SALVADOR GAVIOTA, Richard Bach:
“—Si quieres, podemos empezar a trabajar con el tiempo —dijo Chiang—, hasta que logres volar por el pasado y el futuro. Y entonces, estarás preparado para empezar lo más difícil, lo más colosal, lo más divertido de todo. Estarás preparado para subir y comprender el significado de la bondad y el amor.”
“Y sin más, Esteban Lorenzo Gaviota extendió sus alas, sin el menor esfuerzo, y se alzó hacia la obscura noche. Su grito, al tope de sus fuerzas y desde doscientos metros de altura, sacó a la Bandada de su sueño:—¡Puedo volar! ¡Escuchen! ¡PUEDO VOLAR!”
Muchas gracias Herminia por haberme acompañado en el hermoso desplegar de mis alas.
FELIPE ATEHORTUA
Gracias por compartir teoría, opiniones y opciones sobre el cierre de un proceso y por la sinceridad cuando indicas:
«Saber cerrar un proceso, como todo en la vida, se aprende cerrando procesos»
Efectivamente, conducir se aprende en la autoescuela y practicando con el coche, cocinar se aprende metiéndote en la cocina y atreviéndote a hacerlo…
Me gusta especialmente que durante el post haces especial hincapié en «agradecimiento» y «final abierto», dos aspectos que considero muy sinceros y auténticos en nuestra relación con los coachees, en cuanto en tanto, nosotros también aprendemos de ellos y efectivamente, somos fans de nuestros clientes, estaremos por y para ellos siempre que lo necesiten.
Claudia Zapata Caicedo
Imagino que todo proceso de cierre conlleva sentimientos encontrados por parte del cliente, por un lado alegría de ver sus avances, pero a la vez ansiedad por volar solo, aun consciente de que tiene los recursos necesarios para afrontar cualquier situación, ya que como en todo proceso de coaching teleológico, el respeto está presente en todas las etapas y sólo se llega al cierre si el cliente se siente preparado para llevarlo a cabo.
Ha de ser un momento muy especial ver a tu cliente acabar con el proceso, porque le has visto evolucionar, crecer dentro de las sesiones y que se sienta preparado para seguir adelante, es un signo de que lo has acompañado bien.
Empoderarte hasta sentirte capaz de enfrentarte sólo a las situaciones, es una sensación maravillosa y que un cliente al que has acompañado pueda sentirla en tu presencia aún más.
Me ha gustado mucho lo de final abierto…acaso todas las situaciones de la vida no nos dejan en ese estado? Donde la vida da vueltas y te vuelve a poner en situaciones que ya creías superadas? El tema está en que tu no serás nunca el mismo.
Conecto con la sensación de fluidez que da un cierre de proceso, para sentir unos ganas enormes de empezar a acompañar.
Paula Folch
El cierre es un momento del proceso que vivo con mucha ilusión. Lo que siento me reafirma que estoy dónde quiero estar y que mi propósito es éste, acompañar a otros a descubrir su verdad, la que una vez conectada con ella se da el cambio que el cliente necesita para ser más feliz y conseguir los objetivos que quiere.
El cierre me inspira. Considero muy importante afianzar los cambios y dar especial énfasis a cómo es vivir desde el nuevo paradigma y qué cambia viviendo desde allí (del sentir, del pensar y del hacer).
Es genial, como tocar el ser del cliente y estar presente cuando desvela su luz. Cerrar con puerta abierta.
Gala Guasch
Estar preparados para volar… esa sensación fluirá por su cuerpo, su mirada, su andar, la confianza que desprenderá con sus palabras, se verá capaz de seguir solo con una perspectiva cambiada, habiendo crecido con las decisiones y acciones emprendidas, estará empoderado al conectar con su potencial y poder interior para actuar sobre los problemas que puedan surgirle de ahora en adelante.
El ejercicio del Mandala me pareció muy oportuno para combinar un ejercicio donde actúa nuestro inconsciente y nuestra parte creativa, con un ejercicio más racional. Con el Mandala visualizamos nuestro futuro a 5 años, conectando nuestro proyecto con nuestra parte más táctil, recortando y pasando páginas con cientos de imágenes. Por otro lado estaría la conversación a posteriori haciendo un repaso de las tomas de conciencia y aprendizajes adquiridos durante el proceso, como también los cambios a nivel de pensar, sentir y hacer. Otros dos ejercicios visuales serían la Rueda de la Vida para visualizar los avances y variación de las puntuaciones anteriores y el Escudo de Armas dibujando 4 fortalezas desarrolladas durante el proceso.
De esta manera, el cierre de un proceso sería la fase en que se acaba de dar sentido a todo el viaje hecho por parte del coachee, pero a la vez es un momento en el que como coachs podemos aprender muchísimo con las valoraciones personales que nos haga el cliente sobre nuestro rol profesional, permitiéndonos seguir creciendo y hacernos conectar con nuestro espíritu de superación.
Andrea Gomes
Herminia, gracias por este articulo. A partir de todos los cambios logrados por el cliente, veo la importancia de nosotros coaches conducirnos un cierre de proceso que sea valioso para el cliente, para que los logros sean celebrados, que todos los aprendizajes sean recordados, para que el cliente sepa cual es la continuidad que debe seguir y empoderar el cliente para seguir logrando otros objetivos, y también tener la certeza de apoyarlo si necesitar de algo en el futuro. El cierre hecho en clase fue muy significativo y me mostro también que el cierre del proceso es tan importante como el inicio y todas las otras fases!
Eliana Valencia
El cliente nos irá dándola pauta para saber que se puede hacer el cierre del proceso. Debemos tener la certeza que el cliente puede continuar por sí solo lo que se ha propuesto y que está comprometido con ello.
Como todo proceso que tiene sus pasos lógicos, es válido para darle la seriedad a esta fase, que debemos cerciorarnos que se ha cumplido con todo. Tanto los éxitos y cambios visualizados durante el proceso, como la toma de conciencia, el plan de acción y el compromiso del cliente para con él.
Agradecerle es muy importante, a mi parecer, no solo por la confianza que ha puesto en nosotros, sino también porque como Coach, hemos aprendido en nuestro rol.
Raquel Gómez
Gracias Herminia por este artículo tan significativo. Después de leer este artículo me voy con la idea de que tan importante es saber comenzar y llevar satisfactoriamente un proceso de coaching teleológico, como saber concluirlo; pues saber cerrar un proceso también es una competencia que, como todo en esta vida, se aprende con la práctica. Hasta ahora he centrado todas mis energías en estar preparada para comenzar y poder llevar tanto un proceso como una conversa teleológica, pues ha sido lo que más he practicado hasta la fecha, pero lo que si voy a trabajar es el estar preparada para que esto, el cierre de un proceso de coaching, pueda darse en cualquier momento. Ahora tengo en mi mano tanto los indicios que me harán notar cuando el coachee está listo para que produzca el cierre del proceso como las pautas para que el cierre del proceso sea exitoso para ambos, coach y coachee.
cristina espallargas
Me parece que el cierre del proceso es de alguna manera lo que da sentido a todo el proceso. Es una mirada consciente al camino recorrido, a las pruebas superadas, a las herramientas y recursos encontrados, y a la nueva persona, más fuerte, más consciente, más lo que haya decidido ser, que resulta de la transformación vivida. Pasear esa mirada, desde el coach, con el feedback, y también desde el coachee, con la conciencia de lo aprendido y del crecimiento personal conseguido. Y como coachs, tenemos la responsabilidad de valorar cuando llega el momento del cierre, y hacerlo como el que entrega amorosamente al otro el fruto de horas de conversación, de descubrimientos, de tomas de conciencia, de empoderamientos y de cambios de paradigma. Con todo esto, con todas estas nuevas cosas que conoces de ti mismo, ¿puedes seguir solo tu camino? Es sin duda un momento bonito y poderoso, tanto para el coachee como para el coach.
BEYDY BORDA
Hola
Herminia, es un artículo muy interesante y sobre todo aclarecedor del proceso de cierre; ya que nos aporta aspectos claves a tener encuenta tanto como coach, así como también esos puntos que el cliente debe presentar para poder garantizar con toda certeza que es hora de finalizar y que hemos llegado a nuestra meta.
Macarena Madariaga
Herminia, gracias por el artículo. Es de mucha ayuda para tomar en cuenta todas las aristas del proceso del cliente, para saber cuándo está logrado su objetivo mediante el cambio de paradigma y lo que esto significa en cuanto a las señales que da, que prueban la transformación y el movimiento de éste. Ciertamente utilizaré el contenido de este blog para mis procesos vigentes.
ÚRSULA MARTÍNEZ
Cuando leí por primera vez este arículo, fue antes de acabar el primer año de máster de coaching y liderazgo personal. En ese momento creí que debía memorizarme al pie de la letra, grabarlo a fuego en mi cabeza, para poder ser capaz de hacer cada una de las cosas que se deben hacer. Supongo que todos tenemos miedo a no saber detectar el momento oportuno para el cierre, o no saber desarrollar un cierre al 100%.
Después de reflexionar y hacer el cierre d mi propio proceso como coachee, me doy cuenta que cuando una persona esta preparada para volar, todo viene rodado. ES decir, un cliente acude a nosotros porque tiene un malestar que no sabe gestionar, porque hay algo en su vida que no sabe como cambiar, hay un problema que no sabe solucionar. Pero cuando acompañamos a este cliente en su desarrollo personal y profesional y llega un punto en el que el se ve capaz, un momento en que se ha empoderado de tal forma que ahora es un lider de su propia vida; pues se ha responsabilizado y es completamente autónomo. En ese instante seguro que como coach seremos capaces desde la humildad, la gratitud y el amor, felicitarlo por todos los éxitos logrados y dejar que emprenda el vuelo des de esa libertad que ha descubierto.
Por otro lado, aunque sea consciente que cuando el cliente está preparado para el cierre del proceso se percibe en él un cambio; sigo un poco insegura ante la situación, pues creo que un buen cierre es muy importante y no se puede pasar por alto. De todos modos, creo que es normal, en mi situación de aprendi, pues aun me quedan muchas horas de vuel y todo es cuestión de ponerse en acción.
Gracias Hermínia por tus artículos,siento que con cada uno de ellos voy creciendo un poco más.
Rocio
Muchas gracias por el artículo, creo que resume integralmente lo que debemos tener en cuenta para cerrar un proceso. Esto de no olvidar que es un final abierto tiene mucho de relación con el cuidado que tenemos que tener con nuestro cliente, no significa dar por cerrado el proceso y que te vaya bien, sino que, es importante dejar expresamente establecido y en forma genuina nuestro interés por continuar acompañándolos en la medida que el coachee lo requiera y lo sienta necesario, sin que por ello se genere una relación de dependencia. Me parece además super importante el hecho de recibir feedback de nuestros coachees, eso es fundamental para mejorar nuestra práctica, seguramente ellos o ellas tienen mucho de decir y que sin duda aportará en nuestro desempeño futuro.
Constanza Fernández
Querida Herminia,
Gracias por el artículo. Pronto cerraré el proceso sobre el que basaré mi tesis y este texto ha sido de gran orientación para profundizar en cómo realizar esta fase de manera efectiva.
Todas las variables a tener en cuenta, me confirman el respeto y compromiso de este método con el coachee y, en vista de ello, cuán importante es como coaches continuar de manera permanente con nuestro proceso formativo.
Manuela Núñez
Excelente artículo para culminar un proceso de coaching. El artículo presenta diferentes maneras para cerrar un proceso de cambio, lo que permite que se adapte según el recorrido que se haya tenido con el coachee y según el estilo de cada coach.
Es un artículo que tendré siempre para organizar o planear el cierre de un proceso, con el fin de que el coachee vea todos los cambios que ha alcanzado y el nuevo camino que puede recorrer. Pienso que el cierre del proceso es importante para el coachee como para el coach, ya que personalmente he aprendido mucho en los procesos que he tenido y pienso que es importante expresarle esto al cliente y también tomar consciencia de los cambios que el proceso me ha inspirado.
Sandra Macho
Considero que la sesión de cierre, es una de las sesiones más importantes de todo el proceso, ya que es aquí en donde el coachee toma conciencia de todos sus cambios, y del avance que ha realizado desde la primera hasta esta última sesión.
En mi caso, recuerdo con especial cariño mi sesión de cierre en el proceso que realice hace más o menos un año. Fue allí, en aquel momento, en donde repasando con mi coach todas las síntesis que realizaba al finalizar cada una de las sesiones que hacíamos, donde vi con mis propios ojos los avances que había ido realizando, y pude comprobar como todos aquellos cambios en los que había ido trabajando, ya estaban integrándose en mi. Fue como un «subidón» de autoestima al observar que el trabajo bien hecho había obtenido sus resultados.
Gracias
Gonzalo Arana Palma
Gran artículo, de gran utilidad para el momento en el que nos encontramos, puesto que llega el momento de realizar el cierre de los procesos ya que se acaba el tiempo. Lectura obligada para poder realizar un cierre de una forma óptima.
Silvia
Gracias Herminia porque a través de este artículo, además de aprender la manera de cerrar un proceso de Coaching Teleológico, he podido darme cuenta que existe cierta similitud con la manera de cerrar un proceso de psicoterapia, como por ejemplo: el comprobar que el paciente está avanzando por sí mismo, hacia el objetivo que se había propuesto; el escribir una síntesis del final del proceso; el mostrarnos abiertos y disponibles en caso de que nos pueda necesitar en el futuro; y por último, el agradecer al cliente el proceso realizado.
Silvia
Este artículo me ha ayudado personalmente a tomar conciencia de que ante una situación de bloqueo, hay que pensar en vivir plenamente cada momento a pesar de no tener ninguna certeza de lo que va a ocurrir en un futuro. Que debemos definir un objetivo. Además el lograr cubrir los tres deseos (éxito, adhesión y poder) ayudan a conseguir una fuerte motivación y compromiso, que hace que no necesites tener una clara visión del futuro y te hace centrar en vivir el presente siendo uno mismo. En definitiva, tenemos que pensar que el hecho de que el futuro sea incierto es positivo porque nos brinda la posibilidad de vivir, crecer y aprender.
Herminia muchas gracias
Ana Bolsa
Este artículo me resulta muy adecuado en este momento, en que yo estoy de alguna manera cerrando un proceso. El finalizar el posgrado en técnicas de coaching en inteligencia emocional y social, es en cierta manera, un cierre. Un cierre a una etapa de crecimiento personal muy intenso, que no acaba aquí, por supuesto, pero si que finaliza una etapa.
Dices muy bien que una de las formas de identificar si el cliente esta preparado para cerrar el proceso, es cuando el cliente ha cambiado su estado emocional, su actitud, su mirada, su postura es otra. Eso es exactamente lo que me ha pasado a mí con la realización del posgrado. Mis gafas tienen un cristal de color diferente y por lo tanto miro diferente, actúo diferente.
Gracias por este posgrado que me ha permitido avanzar, crecer y acercarme más a la mejor versión de mi misma.
Myriam Aluanlli
Me encanto el articulo porque es bastante de claro acerca de cuándo y cómo finalizar un proceso de coaching. Además, en este año de practica me inspira mucho poder visualizar lo que se espera al final de un proceso de coaching, el gran aporte y tremendo cambio que puede ser para una persona llegar a un buen nivel de autoliderazgo. Muy motivada.
Inés Caralt
Este artículo me va perfecto en este momento para recordarme que es el cliente quien decide cuando ha terminado el proceso, y nosotros, como coachs, seguimos acompañándole también en esta etapa. Es fácil confundirse y querer «empujar» al cliente a continuar con un proceso que él no ha solicitado, así que debemos ejercitar la humildad y confiar en él.
Esta semana cierro mi primer proceso. ¡Es emocionante!. Lo hago con una síntesis global, pero también me ha gustado tu propuesta de la metáfora sobre lo trabajado o volver a hacer la rueda de la autoestima. ¡Muchas gracias!
Gabriela Pérez
Me ha gustado mucho tu artículo y me hace recordar varias cosas que puedo llevar a mi futuros procesos. Los aspectos que mencionas para el cierre son claros y relevantes apara acabar el proceso, y creo que son muy útiles para todos los involucrados. Me ha gustado mucho lo de celebrar su cambio, estoy totalmente de acuerdo, pues es un paso que quizás hasta puede reafirmar la autonomía y liderazgo personal que ha conseguido el cliente.
Creo que el cierre de un proceso también supone retos y responsabilidades como el inicio del mismo, y hay que tener bastante claro cómo llevarlo a cabo de manera satisfactoria. Por tanto, creo que los puntos que expones son de bastante ayuda para tenerlos muy presente. Muchas gracias!!
Tatiana Hutinel
Excellent articulo.
Creo que un proceso de coaching teleologico es un arte de principio a fin, cada dia me convenso mas de ello y como todo arte en la vida require practica, escucha, observacion, honestidad, entrega, paciencia, espera, crecimiento, danza….
Feliz de estar en este camino y cada dia me apasiona mas el coaching teleologico.
Un abrazo, Herminia
Karin Schuster
Hola Herminia! Gracias por el artículo. Justo cerré un proceso el sábado con una coachee. Hizo el Mandala y fue una experiencia muy enriquecedora y emocionante. Hizo una síntesis del proceso también y termina diciendo que fue un proceso impagable. Qué enorme satisfacción es acompañar a un cliente en su proceso de cambio!!
Cerrar procesos adecuadamente es muy importante y como dices dejar abierta la puerta para el futuro también.
Cariños
Karin Schuster
josep gendra i hom
Hermínia, em sembla un article excel·lent, generós, encertat, pedagògic i valent.
Moltes gràcies!
Miguel de Molina
Un post de enorme utilidad y claridad Herminia. Tan importante como el mismo proceso es cómo lo cerramos. Con este post queda muy claro no sólo cómo podemos hacerlo y qué herramientas pueden resultar muy interesantes para este momento sino también el porqué de la importancia del cierre, la reflexión conjunta con el cliente de sus objetivos, los aprendizajes y tomas de conciencia que ha experimentado durante el proceso y cómo éstos le ayudarán a ganar en autonomía y confianza respecto a su proyecto de vida.
Felicidades!
Raquel Cordoba Marquez
Hola Herminia,
Me ha emocionado poder leer sobre el cierre del proceso, ya que es un momento muy emocionante, no solo para el cliente sino también para el coach, pues significa por un lado el fin de una etapa y por otro lado, el inicio de la misma. Supongo que un cierre de un proceso puede hacerse de muy distintas maneras, en función de la creatividad del coach. Por ejemplo, el hecho de devolver un diploma con el o los objetivos conseguidos durante el proceso me parece apasionante, pues un diploma significa reconocimiento por tus esfuerzos y logro. Creo que como alumnos, nos preocupa el momento en el que debemos cerrar, que uno de los mayores errores es querer alargar el proceso cuando y no podemos avanzar más y lo único que nos queda es dar vueltas sobre lo mismo. Si en última instancia es lo que hacemos, el cierre será forzado e incluso pudiéndonos llevar a resultados negativos. Ya notamos cuando el cliente ha conseguido sus objetivos o ha cumplido con su demanda inicial, y por ello, deberemos estar alerta ante los indicadores que nos pueda suscitar e ir siempre preparados para elaborar un cierre del proceso en cualquier sesión que se nos presente. Un feedback evaluativo, un mapping de todo el proceso, volver realizar la rueda de la vida, una síntesis global,… son muy buenas herramientas para utilizar en un cierre. Me ha resultado interesante también, cuando mencionas el hecho del feedback cliente-coach. Es decir, como coachs estamos muy instruidos sobre realizar feedbacks de todo tipo, pero creo, en mi humilde opinión, que no estamos preparados para recibir feedbacks constructivos por parte del cliente. Sería muy positivo de cara a el desarrollo de nuestra profesión establecer un clima entre cliente-coach que facilitara la expresión de cosas a mejorar por nuestra parte, y nosotros, recibir con los brazos abiertos dichos indicadores para así, poder mejorar nuestra praxis en la guía de los futuros clientes hacia la transformación más reveladora posible.
¡Muchas gracias!
monica sanhueza
Muy interesante este artículo Herminia. Muy clarificador de cómo identificar el término de un proceso y cómo llevarlo.
En lo personal cada vez más involucrada y feliz.
Gracias Herminia
Paula Folch
Yo ahora me he quedado reflexionando sobre el significado de cerrar un proceso. Claro, implica una pérdida del vínculo, de la frecuencia de los encuentros, pero…en el fondo, es una ganancia para ambos. Como bien dices, el cliente gana autonomía y, por tanto, liderazgo; el profesional obtiene una dosis de satisfacción por haberle acompañado con éxito en su proceso de cambio, un sorbo de coherencia por haber contribuido a la misión con la que está comprometido, una continua revisión de aspectos personales surgidos en el proceso del cliente que contribuyen a seguir caminando con actitud de ‘eternos aprendices’… En fin. De nuevo, liderazgo personal. ¿Y no es bonito?
Gracias Hermínia por aportar sabiduría una vez más.
Jordi
Sencillamente brillante articulo…ya que es facil empezar un proceso, pero finalizarlo, es un reto y una responasbilidad.
Muchas gracias Herminia.